“Queremos clasificar y vamos a arriesgar”, expresó el entrenador.

Enfático, convencido de sus ideas, de voz estentórea. Es la imagen que deja Fabián Burbano en una charla que mantenemos en un barcito del legendario estadio Centenario, un coliseo que parece no envejecer. Fue construido en 1930 y luce rozagante todavía, recién pintado para este Sudamericano Sub 20.