Con esa ocasión, el alcalde Jaime Nebot anunció que se pintarían todos los edificios del malecón Simón Bolívar, única vía del centro de Guayaquil que iban a usar las delegaciones extranjeras.
La mayoría de entidades públicas y condominios privados ubicados en esa calle pintaron sus fachadas hasta antes de la fecha de la cita regional, a fines de julio pasado.
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Sin embargo, los que no cumplieron por completo su parte fueron precisamente el Municipio de Guayaquil y la Gobernación del Guayas.
El cabildo se repintó solo hasta el primer piso. Si bien el estado de la pintura anterior no es malo, la nueva capa de color gris en el edificio deja ver claramente, sobre el lado del malecón, las marcas hasta donde se cumplió con el trabajo, lo que le da dos tonalidades a la fachada, que son claramente observables desde la calle y el Malecón 2000.
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Algo peor ocurre con la Gobernación, que se encuentra en proceso de regeneración interna y externa.
Cuando faltaban cuatro días para el encuentro de los presidentes, Diario EL UNIVERSO se refirió al mal estado de la fachada de la principal casa del Gobierno en Guayaquil y la relacionista pública de esa entidad, Janeth Delgado, aseguró que justamente para los días siguientes se programó la limpieza y pintada del edificio. Sin embargo, la pintura solo llegó a varios pilares del área de ingreso al salón Los Libertadores y no a todo el Palacio de la Gobernación, en el lado que da hacia el malecón Simón Bolívar.
Las paredes y cornisas, pese a que fueron parcialmente limpiadas, lucieron sucias y aún continúan así.
Otro problema que denunció este Diario es el estado deprimente que muestran los portales de ese edificio por las noches, sobre todo el ubicado frente al parque Sucre, que lo separa del Municipio.
Alrededor de diez mendigos y alcohólicos utilizan el sitio como urinario público y dormitorio, por lo que nadie se atreve a cruzar por el lugar. Delgado dijo que nunca observó aquello, pero indicó que aunque la entidad solicita colaboración de la Policía no se consigue aún guardianía para evitar esos problemas.
En el edificio de la Gobernación, del lado que da al parque Sucre, funciona también el Instituto de Historia Marítima de la Armada, que tampoco ejerce control para cambiar esa imagen. En los portales del Palacio Municipal no ocurre lo mismo ya que en el lugar hay vigilancia de miembros de la Policía Metropolitana.
Delgado señaló que la Gobernación está en proceso de restauración interna y externa y que se cumple un cronograma de labores que incluye la pintura de todo el edificio.