El alcalde de Guayaquil, Ab. Jaime Nebot, inauguró hoy el túnel del Cerro Santa Ana, obra ubicada en la vía al final del Malecón 2000.
Miles de guayaquileños, desde tempranas horas se reunieron en los alrededores del ingreso del túnel para presenciar su apertura, oficializada por el alcalde de la ciudad.
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Al acto acudieron el vicealcalde, Luis Chiriboga, los diputados Pascual del Cioppo, Cinthya Viteri, empresarios, autoridades civiles, eclesiásticas, representantes de la empresa constructora OHL Semaica y trabajadores de la obra.
Durante su intervención, el Alcalde destacó que su labor no era trabajar para el cemento sino para que cada uno de los guayaquileños se sientan orgulloso de vivir y pertenecer a la ciudad.
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Agradeció por la obra, primero a Dios y después al ex alcalde Febres-Cordero -por haber sido el iniciador de los cambios que ha tenido Guayaquil-, a todos los organismos -como la Corporación Andina de Fomento (CAF)- que hicieron posible su culminación, y a los trabajadores ecuatorianos que han demostrado cómo hacer bien las cosas.
Monseñor Roberto Pazmiño, Vicario de la Arquidiócesis de Guayaquil, luego de la intervención del Alcalde, bendijo la obra y roció agua bendita al sitio.
Luego de cortar la cinta, el Primer personero municipal, junto con la comitiva, las autoridades, la reina de la ciudad, invitados y todos los ciudadanos que asistieron al evento, ingresaron al túnel para recorrerlo y observar la magna obra, verificando cuánto tiempo toma llegar a la avenida Pedro Menéndez y por ella al norte de la ciudad.
También anunció que en el mes de octubre firmará un nuevo empréstito para realizar obras como los tres corredores de transporte masivo con sus respectiva terminal de transferencia y los viaductos de la calle Quito y Machala, con cuyas obras se cerrará el círculo de trabajos en el desarrollo de la ciudad.
El prefecto del Guayas, Ec. Nicolás Lapentti, calificó la labor de la Municipalidad, a través del Alcalde, como una explosión de obras que están conduciendo a Guayaquil a ser gran metrópoli, con una infraestructura adecuada, como debe ser una ciudad del siglo XXI.
Lapentti destacó la gran demostración de autoestima que se percibió en los ciudadanos que acudieron a presenciar esta gran obra.