Se ha celebrado el Sínodo acerca de la Amazonía. Mucho debo al ejemplo de misioneros en nuestra región Amazónica, como Jorge Mosquera. franciscano; Maximiliano Spiller, josefino; Alejandro Labaca, capuchino; Pedro Gabrielli, salesiano.

Especialistas reflexionarán acerca del Sínodo Querida Amazonía. Opino que es útil recordar las primeras comunidades cristianas, antes de señalar frutos del Sínodo.

Jesús mandó a los doce apóstoles a llevar la Buena Noticia de que Dios ama sin distinción a hombres y mujeres que acepten ser amados. Fundaron iglesias (comunidades) en diversos países.

Todas estas iglesias tienen en común la Palabra de Dios escrita (Biblia). Y lo que actualmente llamamos “sacramentos”: bautizo, la cena del Señor o eucaristía, la reconciliación, la unción de los enfermos, el matrimonio, el orden sacerdotal, para presidir la comunidad, sirviendo como Jesús. Los sacramentos se celebraban (se celebran) en la lengua de esos pueblos, con signos, o expresiones de esos pueblos. (El don es el mismo, el papel de regalo es diverso).

Las iglesias fundadas por los apóstoles fueron multiplicándose. De todas acudían a Roma, al sucesor de Pedro, para recibir aliento, orientaciones, correcciones, comunicación de experiencias.

El Imperio romano de Oriente, cuyo centro era Constantinopla, se separó del Imperio romano de Occidente, cuyo centro era Roma.

Las diferencias existentes en lengua y otras expresiones de cultura e intereses de gobernantes dificultaron la intercomunicación. A pesar de dificultades de lengua, cultura, liturgia, algunas iglesias en Oriente siguen unidas a Pedro-Roma. Conservan su lengua, su liturgia, su legislación interna.

La lengua latina era un distintivo de la Iglesia católica. Conserva su importancia no solo en la liturgia, sino también en documentos históricos, teológicos, litúrgicos.

El celibato tiene su origen, fuente e inspiración y acompañamiento en Jesucristo. Se ilustra como la ofrenda de la mejor oveja por parte de Abel. Ofrenda que no esteriliza, hace más libre y eficaz el servicio al hombre por amor a Dios. A más de ofrenda de uno de los mayores bienes, reconoce que Dios es la fuente de todo bien y que la honra de Dios se concretiza en la mayor libertad para servir al hombre. El celibato es consejo de Cristo. No mandato. No puede ser suprimido por presión alguna, como la que exagera la infidelidad (del 5 % real a un porcentaje imaginario).

La Iglesia católica cultiva el consejo de Cristo de ofrecer a Dios lo que comporta el amor sexual, para servir con mayor libertad a la humanidad. Unos de los servidores, gracias al celibato, son los misioneros, quienes, sostenidos por el amor a Jesucristo, el Misionero de Dios Padre, dejan a padres y hermanos por llevar a Cristo, no solo ni necesariamente a pueblos lejanos, sino a quienes no lo conocen ni conocen su plan de salvación.

La mayor difusión de la Iglesia católica se debe a misioneros(as), a quienes el celibato permitió dejar familia, país, lengua.

El Sínodo ha insistido: -Evangelizar no es colonizar. -No es imponer una cultura. -Inculturación de la liturgia. -Solo el presidir la eucaristía es indelegable. -La acción de la mujer fue y es indispensable. -Catolicidad es unión en la diversidad. (O)