Es tan “actor” como estafador. Lo han detenido, aseguran 20 veces, por realizar el mismo modus operandi. Esta vez lo atraparon en Alicante, España, donde lo conocen como el “gastrojeta”.

Tan particular apodo se lo ganó como acostumbra: comer sin pagar la cuenta en restaurantes y bares, refieren los medios españoles. Pero antes, finge infartos, señaló La Vanguardia.

Está identificado como Aídas J., de quien en El País señalaron es oriundo de Lituania. Ese medio, publicó el 21 de septiembre de 2023, cómo es, generalmente, su accionar para irse sin cancelar lo que con gusto comió. A esa práctica la llaman, coloquialmente, en España “simpa”.

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“De primero, siempre ensaladilla rusa. Regada con whisky. De segundo, un buen plato contundente y caro, como entrecot o arroz con bogavante (paella). Y más whisky. Y de postre, esperar con uno o dos vasos de whisky, preferiblemente de la marca White Label, a que llegue la policía, porque no piensa pagar el consumo”, describió El País como actúa el “gastrojeta”.

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20 arrestos en un año

De acuerdo con La Vanguardia, este sujeto, de unos 50 años, aparenta llevar vida de ricos, como cantaba Camilo.

Viste unos pantalones largos de color gris, un polo, zapatillas de trekking (senderismo) y un chaleco de marca.

El lituano no habla español, aunque parece que lo entiende, detalló EFE y reseñó la prensa española. La primera vez lo detuvieron corría noviembre de 2022. A la vuelta de 10 meses, van 20 arrestos.

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Un policía dijo que ha estado en cuatro de las aprehensiones y por eso se conocen más detalles de este sujeto. El hombre pide la comida y después se niega a pagar fingiendo estar indispuesto, indica también Antena 3.

Así fue la reciente detención del “gastrojeta”

En Antena 3 contaron que el martes 19 de septiembre, llegó a un restaurante de la calle Mayor y pidió una paella de marisco y un whisky.

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Paella, acostumbra a pedir el lituano. Foto: Pexels/Deane Bayas

-Se lo bebió de un trago, antes de pedir otro doble para acompañar al arroz, dijeron. Luego, “se negó a pagar los 34,85 euros de la cuenta”.

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Pretendió huir, pero un camarero le recordó que aún no había pagado. El ‘gastrojeta’ le respondió que iba al hotel para buscar el dinero.

Sin embargo, se vio “cazado” y entró en el papel de actor: “se tiró al suelo y fingió estar indispuesto”. Fue el fin del show, porque “los dueños del restaurante llamaron a la Policía”.

Intentó una coartada más: pidió a los agentes que llamaran a una ambulancia, pero los policías, dice Antena 3, reconocieron al “gastrojeta” y se lo llevaron.

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Entre que pagaba y no pagaba, que se tiró al suelo, y estaba bien o no y que llegó la Policía y lo levantó… estuvimos entre una hora y media y dos sin poder facturar, con el restaurante totalmente parado por el escándalo. Y eso nadie lo paga.

Juan Carlos Gracia, administrador del restaurante

El gerente del restaurante El buen comer, Moisés Doménech le tomó “varias fotos al ‘gastrojeta’ y las ha pasado a otros restaurantes de la Asociación Provincial de la Hostelería (APEHA) para que no vuelva a hacer de las suyas en un futuro próximo”, divulgó La Vanguardia.

El lituano compareció el jueves a un juicio rápido. El País informó: “Uno de los tres juzgados decretó su encarcelamiento por reiteración de un delito leve”.

La Fiscalía, de acuerdo con EFE, pidió para el ‘gastrojeta’ tres meses de multa a razón de 10 euros diarios, pagar la cuenta pendiente con ‘El buen comer’, de 34,85 euros, y seis meses de alejamiento con este local”... No se reportó si fingió sufrir un infarto.

(I)

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