La moda sostenible fue la gran protagonista anoche, miércoles 6 de diciembre, en el auditorio del MAAC, en donde se llevó a cabo el gran desfile Weya 2023. Se trató de un encuentro más allá de la moda, donde el concepto, las tradiciones, la herencia cultural, el valor de nuestros artesanos y la conciencia ambiental tuvieron un lugar importante.

“Los creadores de contenido auténticos entienden que el nuevo lujo es discreto y apuesta por la vida”, dice José Forteza, de Vogue Latam, invitado a Weya: orígenes

El desfile fue inaugurado por la cuencana Ana Andrade, quien presentó su Vestido Red, seguido de la quiteña Gisela Cisternas, quien presentó Aretes La Fiesta de la Jora, en colaboración con artesanas de Cotacachi. Este flujo de talento continuó con AMA, la Asociación de Mujeres Agroartesanales de El Oro, y la artista Gisella de Chávez de Guayaquil, que reinterpretó el antiguo Ecuador.

Proyecto Weya cerró con una innovadora pasarela.

Un total de 37 talentos emergentes, entre diseñadores y artesanos, presentaron sus innovadoras propuestas creadas con materia prima originaria de rincones del país (como la piel de la alpaca, la lana de borrego), así como con materiales reciclados: ropa en desuso, yute reciclado, fibra de banano, plástico regenerado, entre otros.

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“Ha sido un trabajo muy largo. Esto es puro talento ecuatoriano. Cada trabajo que se lució esta noche fue un proceso de talleres, de inducción”, manifestó Karla Paredes , directora de Weya, rodeada de todas las creadoras en el escenario del MAAC.

“La creación de alianzas y la construcción de relaciones sólidas es el tejido que fortalecerá la moda ética globalmente”, enfatizó por su parte Bianca Dáger, CEO de Weya, quien aseguró que la próxima edición estará acompañada de una feria.

Proyecto Weya cerró con una innovadora pasarela.

La pasarela estuvo amenizada por la música de Juan Diego Illescas, quien también presentó la música oficial que creó para Weya. Su espectáculo estuvo complementado con un fascinante juego de luces y una proyección de imágenes psicodélicas que iban en sincronía con su música.

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Este desfile fue la clausura del extenso cronograma de dos días que ofreció Weya, que estuvo compuesto por conferencias, workshops de cocreación artesanal, panel de economía circular, exhibiciones y más. (I)