Matilde Cevallos, de 40 años, tenía una tienda en el sector Las Cumbres en Manta que era el sustento de sus cuatro hijos. ‘Mi guerrera Aleskhita’ era el nombre del establecimiento, en honor a su pequeña de ocho años que perdió la visión, producto de un tumor cancerígeno que le detectaron en el cerebro hace cinco años.

Pero aquel 16 de abril, el terremoto le quitó lo material, su casa y su tienda, pero no la vida ni las esperanzas.

Siete meses después de la tragedia recibió una tienda eco-amigable en el sector Ceibos Renacer de manos de Cervecería Nacional (CN) a través del programa Manabí de Pie, que busca la reactivación económica y social de la provincia.

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La fundación Oswaldo Loor, por su parte, le donó una villita a la que se trasladará dentro de un mes.

Hugo Orellana, representante de CN mencionó que ya fueron entregadas las primeras 10 tiendas amigables con el ambiente, un contenedor de 20 pulgadas que cuenta con un sistema fotovoltaico de paneles solares conversores de voltaje, bombas de agua, lámparas LED, dispositivos para la conexión pública y estructura antisísmica.

“Manabí de Pie es un fondo para la reactivación económica a través del apoyo a propietarios de tiendas que perdieron todo con el terremoto”, señaló. Las ecotiendas también fueron entregadas en Portoviejo, Calceta, Chone, Jama, Canoa y Bahía. Además, se capacitó durante ocho semanas a 800 tenderos damnificados.

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Otra beneficiaria fue Dioselina Mera en Portoviejo, cuya tienda está ubicada a dos cuadras de la zona devastada de la ciudad. (F)

El contenedor es de gran ayuda, he retomado mi actividad y estoy agradecida. Soy de Santa Ana. Esta es una tienda completa.DIOSELINA MERA, beneficiaria.