Médicos y farmacéuticos canadienses vinculan las muertes de al menos 23 mujeres en el país, en el periodo 2007-2013, al consumo de un tipo de píldoras anticonceptivas, dijo hoy la televisión pública canadiense CBC.

Documentos del Ministerio de Sanidad canadiense obtenidos por CBC indican que esos profesionales de la salud apuntan a las píldoras, comercializadas bajo los nombres de Yaz y Yasmin, que contienen el compuesto químico drospirenone, como posibles causantes de más de una veintena de muertes.

La revelación se produce pocos meses después de que un juez del Tribunal Superior de Justicia de Ontario, la mayor provincia de Canadá, admitiera una demanda colectiva contra el fabricante de las píldoras, la multinacional alemana Bayer.

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Otras 12 demandas colectivas han sido presentadas en el resto del país aunque todavía no han sido admitidas por los jueces.

En el caso de Ontario, que implica a centenares de mujeres, los demandantes alegan que Yaz y Yasmin tienen graves efectos secundarios como la formación de coágulos de sangre.

Las autoridades sanitarias canadienses avisaron en diciembre de 2011 que las píldoras anticonceptivas que contienen el compuesto químico drospirenone, Yaz y Yasmin, "pueden estar asociadas con un riesgo de coágulos sanguíneos que es 1,5 a 3 veces mayor que otras píldoras contraceptivas".

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Pero el Ministerio de Sanidad de Canadá permitió seguir comercializando el producto a pesar de que según los documentos oficiales obtenidos por CBC, entre 2007 y 2013 médicos y farmacéuticos informaron de 600 reacciones adversas y 23 muertes entre las mujeres que tomaban Yaz o Yasmin.

Los documentos indican que más de la mitad de las fallecidas eran menores de 26 años, y la más joven de ellas tenía 14.

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Después de que el Ministerio de Sanidad de Canadá avisase en diciembre de 2011 sobre la asociación entre coágulos de sangre y píldoras con drospirenone, Bayer dijo a través de un comunicado que el riesgo de coágulos "es comparable" a otras contraceptivos orales.

La empresa farmacéutica añadió que el riesgo de una mujer que "toma contraceptivos orales de baja dosis, incluidos Yaz y Yasmin, es menor que el riesgo de coágulos de sangre asociados con el embarazo y el parto".

En Estados Unidos Bayer ha pagado más de 1.000 millones de dólares para llegar a acuerdos con miles de mujeres que también habían presentado demandas colectivas por los efectos de Yaz y Yasmin.