En Düren, Alemania, fue detenido por la Interpol este viernes 16 de junio Jean Paul Pisco Galarza, un ecuatoriano de 40 años que desde el 2020 estaba en el listado de los más buscados por el delito de femicidio.

El crimen de su esposa, Valeria Vargas, se dio en octubre del 2019 cuando la pareja y su hijo de 5 años llegaban desde España, su lugar de residencia, a Ecuador para visitar a sus allegados.

La familia fue supuestamente secuestrada al tomar un taxi en el aeropuerto José Joaquín de Olmedo, a Jean Paul y a su hijo los abandonaron en la vía Perimetral, pero a Valeria se la llevaron y apareció al día siguiente sin vida en Monte Sinaí, cerca del llamado canal de la muerte. Tenía un corte en el cuello.

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Según la Fiscalía, Jean Paul contrató a una banda para ejecutar el falso secuestro y matar a su pareja. Se presume que lo hizo con ayuda de sus familiares que estaban en Ecuador.

La orden de detención contra él se giró en 2020 cuando Jean Paul ya estaba de vuelta en España, por lo que huyó a otros países de Europa. Fue capturado hoy, cuatro años después de la muerte de su esposa.

La Fiscalía del Guayas efectuó la pericia de explotación y extracción de información de llamadas telefónicas al celular del esposo y se determinó que el presunto asalto y la muerte fueron planificados por él, y que, para lograr su cometido, contrató a cuatro personas, entre ellas, a su propia tía.

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La mujer y dos de los autores materiales fueron detenidos, juzgados y sentenciados. Ellos son Rosario Elizabeth P. R., Jonathan Bryan V. A. y Joseph Alexander V. A.

Valeria, quien era oriunda de la península de Santa Elena, llegaba a Ecuador para darle una sorpresa a su madre por su cumpleaños. No había visto a su familia en seis años desde que migró. (I)