Dos beneficios en la construcción: rebaja del IVA al 5 % y su efectiva devolución, levantan expectativa en el mercado

Roberto Mena, esposo y padre de familia, se encuentra en estos días afinando todos los detalles para arrancar con la construcción de su casa propia en el norte de Quito. Ya contrató la mano de obra y ha comprado varios productos con el impuesto al valor agregado (IVA) del 12 %. Sin embargo, espera que con la entrada en vigencia de la nueva ley, que cambia el IVA para materiales de construcción al 5 %, bajen los precios, especialmente los de los acabados, que los comprará en un poco más de un mes.

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Como se enteró en las noticias que la ley se aplicará el 1 de abril, cuenta que en los días que faltan para esa fecha los maestros a los que ha contratado van a trabajar en los cimientos y ocupar la varilla que ya estaba comprada.

Está optimista de poder cumplir el sueño de su familia, que dice ha tardado bastante, pues los permisos de construcción han sido muy demorados. “Los conseguimos luego de cinco años”, asegura.

Efectivamente, la Ley para enfrentar el Conflicto Armado, la Crisis Social y Económica, además de subir del 12 % al 13 % el IVA de manera general y dar la facultad al Presidente de aumentarlo hasta el 15 % -como ha anunciado que lo hará desde el 1 de abril-, hace una excepción con el tema de los materiales de construcción, cuyo IVA baja al 5 %.

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Sobre el tema, Xavier Andrade, socio fundador de ACF Soluciones Empresariales, que brinda asesoría en temas tributarios, confirma que al aplicarse la nueva ley seguramente habrá una rebaja efectiva en el precio de las viviendas, aunque asegura que es necesario hacer un estudio profundo para saber la dimensión de esta disminución. Aclara que el beneficio empezará a regir seguramente desde el 1 de abril, tomando en cuenta que el 6 de marzo sería publicada en el Registro Oficial y que los impuestos entran a regir al mes siguiente de publicada la ley.

Explica, sin embargo, que para su aplicación se esperaría que el Servicio de Rentas Internas (SRI) trabaje un reglamento en el que se establezca cuáles son los materiales a los cuales se les rebajará el impuesto.

Andrade comenta, de otro lado, que ya se encuentra aprobado otro beneficio para el sector de la construcción y que es la devolución del IVA. Este fue aprobado en la Ley de Eficiencia Económica en diciembre del 2023, en el caso de que los constructores se registren en el Ministerio de Vivienda y cuenten con todos los permisos municipales. En este sentido, los constructores pueden hacerse acreedores a un doble beneficio, dice.

Entre tanto, Henry Yandún, presidente de Constructores Positivos, explica que por efectos de la baja del impuesto del 12 % al 5 %, el costo de la casa podría disminuir al menos un 4 %, tomando en cuenta que no todos los productos que intervienen en la construcción tienen IVA. Al momento están expectantes frente al reglamento que estaría elaborando el SRI para aclarar el listado de productos a los cuales se les aplicará la rebaja.

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La devolución del IVA, de la que ahora podrán gozar los constructores que registran sus proyectos y que cuentan con los permisos legales, se vuelve un beneficio justo, pues la construcción era la única actividad productiva que no podía cobrar IVA en su producto final (casa), aunque sí pagaba IVA en todas las etapas anteriores. Al no poder hacer este cobro, el costo sí se trasladaba al cliente. Ahora, en cambio, podrán pedir la devolución del IVA pagado y esto podrá redundar en la caída del precio de la vivienda. Sin embargo, asegura que esto dependería de que la devolución sea efectivamente ágil. De lo contrario, el constructor no podría arriesgar a bajar dicho costo. Asegura que la exigencia de registro y permisos es positiva para formalizar la construcción.

Pese a haber estos dos beneficios, Yandún considera que la baja del IVA podría adolecer de una dificultad en su aplicación. Al cambiar el IVA solo para las operaciones locales, no está claro qué pasará, por ejemplo, con compras de materia prima importada o con las compras que hacen los fabricantes de materiales de la construcción. Explica que si una empresa importa cerámicas, por ejemplo, paga el 12 % del IVA de operaciones externas, pero al vender el producto debe cobrar solo el 5 %. Es decir, tendría una pérdida que seguramente la compensará subiendo el valor al cliente. Entonces, no se logra el efecto deseado. El tema se resolvería si se hace un reglamento especial para que en estos casos se les proteja de alguna manera a los fabricantes y proveedores de materiales de construcción. “La rebaja al 5 % será beneficiosa si se incluyen también los insumos utilizados en la fabricación de materiales de construcción y adicionalmente un mecanismo de compensación que incluya a dichos insumos”, comenta.

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El gremio de Constructores Positivos recuerda que el sector inmobiliario cerró el 2023 con un 20 % menos de reservas y ventas, lo que para esta industria es el segundo peor año de su historia, después del 2016.

Según el reglamento a la ley de eficiencia, vigente desde el 7 de febrero, el SRI podrá devolver el IVA previo a la finalización del proyecto inmobiliario.

Aunque el reglamento no lo detalla, la Ley establece que la devolución debe realizarse en un plazo no mayor a 90 días, a través de la emisión de una “nota de crédito”. Esto les permitiría a los contribuyentes pagar otros impuestos. (I)