La existencia de la deuda de salud que mantiene el Estado con el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) por $ 2.527 millones se puso en duda nuevamente, ayer, por parte del ministro de Finanzas, Carlos de la Torre. Esto, 24 horas después de que la Contraloría certificara públicamente, a través de un informe inapelable, que dicha obligación sí existe y que no fue legal eliminarla de los Estados Financieros del IESS, en septiembre del 2016.