Los gremios de trabajadores de varias ciudades del Ecuador salieron a las calles este domingo a propósito del Día del Trabajo, pero estas manifestaciones también estuvieron matizadas por la solidaridad con las víctimas del terremoto del pasado 16 de abril.

En Guayaquil, por ejemplo, miembros de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) oraron y dieron donaciones para los damnificados, en los exteriores del coliseo Abel Jiménez Parra, hasta donde llegó el gobernador Julio César Quiñónez. Ahí también se condecoró a los rescatistas que participaron en Manabí.

En el puerto principal también hubo otra concentración encabezada por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), que empezó a las 09:30. La marcha inició en 9 de Octubre y Lorenzo de Garaicoa, recorrió las calles Colón, Boyacá, la avenida Olmedo, el Malecón y regresó al punto de partida. Participaron trabajadores de asociaciones de empleados de Nestlé, Instituto de Neurociencias, cooperativas de transporte, educadores, entre otros.

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Mientras que en Quito los manifestantes, convocados por la CUT, se congregaron en la Plaza Grande. Al denominado "Primero de Mayo Solidario" acudieron movimientos y organizaciones sociales como Amazonía Vive, Todos Por la Salud, integrantes del Seguro Campesino, de los Comités de la Revolución Ciudadana, entre otros colectivos locales y de provincia cercanos al oficialismo.

Fausto Dután, dirigente cercano al régimen, explicó que aunque el acto tenía un fuerte recordatorio histórico de lo sucedido en 1886 con trabajadores en Chicago, Estados Unidos, lo fundamental era la solidaridad con las víctimas de la tragedia que se vive en provincias como Manabí, Esmeraldas y Guayas.

Decenas de policías se apostaron en las esquinas cercanas a la Plaza Grande, donde también se ubica el Palacio de Carondelet, para brindar seguridad a los participantes de la concentración, pues a pocas cuadras, a esa misma hora, circulaba la marcha convocada por el FUT y otros sectores de oposición.

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AMBATO

Desde las 09:30, alrededor de 2.000 personas, entre trabajadores, comerciantes, jubilados, profesionales, dirigentes barriales, integrantes del Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT) e incluso miembros de la Casa de la Cultura, participaron en la marcha que recorrió las calles céntricas.

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Fredman Guerrero, dirigente del MIT, señaló que la marcha además es solidaria porque se quiere demostrar que los ecuatorianos están con los damnificados del terremoto.

Luis Centeno, de la Unión General de Trabajadores del Ecuador (UGTE), puntualizó que desde el martes anterior se hizo una colecta de víveres y agua en las sedes sindicales. Las donaciones fueron entregadas a las autoridades, para que las transportaran hacia las zonas afectadas.

LOJA

En esta ciudad, trabajadores reunidos en la plaza de San Sebastián decidieron marchar por las principales calles céntricas, hasta llegar a la plaza central, con el propósito de ingresar a los exteriores de la Gobernación. Sin embargo, un numeroso contingente policial se colocó con vallas metálicas en las calles de ingreso.

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Con consignas en contra del Gobierno, se mantuvieron en el sector hasta casi el mediodía, expresando su rechazo a las autoridades locales y nacionales.

Por otra parte, en los exteriores de la Gobernación se realizó una radiomaratón, organizada por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), con la finalidad de obtener donaciones ciudadanas que serían enviadas en las próximas horas a la provincia de Manabí.

Pequeños incidentes que no pasaron a mayor situación se vivió en la intersección de las calles Sucre y 10 de agosto, cuando los representantes de organizaciones clasistas, intentaron derribar las valles que eran protegidas y reforzadas por personal policial. (I)