Dos horas de caminata llevó a trabajadores de varias fábricas, dirigentes sindicalistas, de los indígenas, profesionales como los abogados, comerciantes, militares en servicio pasivo, ciudadanos y militantes de los grupos políticos de oposición hasta unos pocos metros de la Asamblea Nacional.

Las mallas, el resguardo de los policías, incluso con caballos, detuvo su camino en la calle Gran Colombia, al frente del hospital Eugenio Espejo.

Escoltados durante todo su recorrido, que empezó pasadas las 16:30 en la Caja del Seguro, por policías, el avance de esta nueva marcha en contra de las enmiendas constitucionales y de políticas del régimen se dio de forma pacífica y no se resgistraron desmanes.

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Los dirigentes anunciaron que en las próximas horas se reunirán para definir la fecha de un nuevo paro nacional, y que regresarán a las calles en el momento que Alianza PAIS (AP), que lidera la Asamblea, convoque al segundo debate para el proyecto de enmiendas, sostuvo Pablo Serrano, de la Ceols. Ese debate aún no tiene fecha, pero ha estado previsto para la primera semana de diciembre.

Mientras, los militares en servicio pasivo se sumaron una vez más porque consideran que habrá un efecto en la enmienda que trata sobre el rol de las Fuerzas Armadas. El coronel retirado Jorge Villavicencio ve una posible afectación directa de la convivencia entre los militares y la comunidad porque fueron formados para otro tipo de acción, no de la parte urbana. Además les preocupan sus pensiones jubilares.

En tanto, desde la Plaza Grande, al pie de Carondelet, una feria de la no violencia, un concierto musical y exhibición de microemprendimientos congregó a los adherentes al Gobierno, para responder así a la intención de sectores sociales contrarios a las enmiendas constitucionales de cercar a la Asamblea Nacional.

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Desde las 10:00 más de 40 carpas de la Junta Nacional de Defensa del Artesano presentaron sus productos, como collares, vestimenta o alimentos.

Desde las 16:30 se inició un concierto de música frente al atrio de la iglesia la Catedral.

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Los animadores, a la vez que daban consignas contra la violencia de género, también lo hacían a favor de la Revolución Ciudadana.

Frente al Palacio de Gobierno se congregaron simpatizantes del Régimen con banderas de Alianza PAIS (AP).

La presidenta de la Asamblea, Gabriela Rivadeneira (AP), llegó a la plaza pasadas las 17:00. Al ser consultada si la sesión de la Legislatura donde se analizarán las enmiendas constitucionales será en la capital, respondió que sí.

Las calles circundantes a Carondelet, como la García Moreno o Guayaquil, fueron cerradas con cordones policiales al tránsito vehicular y con vallas.

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Hubo lapresencia de empleados de entidades públicas en la Plaza Grande. Además de integrantes de la Central Unitaria de Trabajadores. (I)

Las enmiendas aprobadas en la Comisión no recogen las aspiraciones de las organizaciones sociales, y no brindan amparo a trabajadores, al sector.Víctor Sánchez, comerciante minorista