El último trimestre del año suele conllevar un dinamismo beneficioso para el sector empresarial, por las compras navideñas, las expectativas de planes frente al nuevo año y aumento de exportaciones. Sin embargo, la baja en los precios del petróleo y fenómenos naturales como la ceniza del volcán Cotopaxi y la presencia de El Niño han bajado las expectativas.

Esto se suma a lo declarado por el presidente Rafael Correa el martes de la semana pasada: “Puede ser que este año no crezcamos o decrezcamos”. De hecho, el primer trimestre de 2015 tuvo un decrecimiento del 0,5% frente al trimestre anterior. Esa fue la mayor baja desde finales de 2009.

En una comparación entre trimestres similares, el ritmo de expansión de la economía se ha reducido (ver gráfico).

Publicidad

Francisco Alarcón, presidente de la Cámara de Industrias, indica que las fábricas planean producir la misma cantidad e incluso menos que en años anteriores. Agrega que el gremio tiene un promedio de 35% de capacidad de producción sin utilizar, aunque la cifra varía entre los afiliados.

Juan Carlos Díaz-Granados, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Guayaquil, explica que en lo que va del año el consumidor ha comprado menos y eso se nota en la recaudación de impuestos como el IVA. El recaudo de ese rubro fue menor en mayo (-$ 1,38 millones) y junio (-$ 13,08 millones) frente a similares meses del año pasado, según datos del Servicio de Rentas Internas.

Díaz-Granados hace especial hincapié en que el último trimestre del año suele ser el más dinámico. Sin embargo, dice que esta vez les afectan las salvaguardias y normas técnicas.

Publicidad

Los constructores también prevén menos movimiento económico. Enrique Pita, presidente de la Cámara que representa al sector, dice que los consumidores han restringido sus gastos y aplazado planes como comprar viviendas. Agrega que también hay una baja en el crédito que afecta al sector.

En tanto, Felipe Ribadeneira, presidente de la Federación de Exportadores, dice que se han visto afectados por la caída de ceniza, la baja en el precio internacional de las materias primas y la desaceleración de la economía. Esto, sin contar con la alerta del fenómeno de El Niño, indica. Cree que el escenario más positivo sería que las ventas se ubiquen en niveles de 2014. (I)