El concejal de Quito, Antonio Ricaurte, indicó este miércoles que el movimiento VIVE no apoyaría la construcción del metro si es que Odebrecht es la encargada de la obra. Según Ricauerte, en Brasil hay cuestionamientos a la empresa por casos de corrupción.

Además, expuso otros condicionamientos al alcalde Mauricio Rodas para respaldar la edificación del sistema de transporte público.

"La empresa que presentó la oferta más baja, en este caso Odebrecht en consorcio con Acciona, tiene serios cuestionamientos de carácter hasta penal en Brasil, debido a contratos de corrupción con la petrolera Petrobras por más de 2.000 millones de dólares; tanto es así que su dueño y presidente está preso (...)", dijo Ricaurte en el noticiario de Ecuavisa.

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La Fiscalía de Brasil denunció formalmente, el pasado 24 de julio, por corrupción, lavado de dinero y asociación para delinquir a 22 personas, entre ellos los presidentes de las constructoras Odebrecht y Andrade Gutiérrez, en un caso vinculado con el escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petrobras.

La Justicia de Brasil aceptó el martes (ayer) la denuncia presentada por la Fiscalía contra el presidente de Odebrecht y otras doce personas.

El concejal de VIVE indicó hoy que han hecho señalamientos al alcalde Rodas para apoyar la obra. "Uno, que la renegociación hacia la baja sea última y definitiva, que sea escrita en piedra (...) Dos, que la Contraloría General del Estado haga un examen especial de toda la construcción del metro hasta la fecha; y tres, si es que no es Odebrecht una empresa cuestionada, actualmente con problemas enormes con la justicia brasileña y con elementos de corrupción (...) la que construya el metro en la capital (...)", refirió en el medio televisivo.

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Señaló que la empresa brasileña ya tuvo problemas con obras en Ecuador como es en la construcción de la Ruta Viva, la hidroeléctrica San Francisco, entre otras.

Finalmente, Ricaurte aclaró que su postura "es una posición personal, yo hablo siempre a título personal, porque tengo esa responsabilidad; y, segundo, me pertenezco al movimiento VIVE, y el movimiento VIVE tiene esa misma posición y tiene los elementos, los argumentos que yo acabo de esgrimir, pero solamente será una posición".

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Al final del día, "el alcalde y el ente administrativo, ejecutivo del Municipio de Quito, es quien tendrá que tomar la decisión", puntualizó. (I)