Nueve meses después de que Ecuador aprobara el nuevo Código Orgánico Integral Penal, que modula las penas por tráfico de estupefacientes según el peso y tipo de droga portados en la detención, solo dos españoles de un total de 50 que permanecen en cárceles nacionales y españolas han salido en libertad, a pesar de tener cumplidas íntegramente sus condenas. La denuncia la hace la Fundación Abogacía Española que pide celeridad a las autoridades penitenciarias de ambos países para evitar que los plazos se dilaten aún más.













