La plaza de Santo Domingo, en el centro de la ciudad, resultó ayer estrecha para albergar a miles de personas que participaron en la marcha convocada por el Gobierno.

La movilización partió a las 09:25 encabezada por el presidente Rafael Correa desde la av. Maldonado y Pedro de Alfaro, al sur de la ciudad, en medio de un gran operativo de seguridad, que incluyó personal militar y drones, que sobrevolaron la marcha. Junto a Correa caminaron el vicepresidente Jorge Glas; la presidenta de la Asamblea, Gabriela Rivadeneira, y el ministro de Trabajo, Carlos Marx Carrasco. Ellos recorrieron unas 15 cuadras, en unos 25 minutos, para llegar a Santo Domingo, punto de la concentración oficial.

La logística de la movilización gubernamental, sin embargo, inició tres horas antes con la llegada de cientos de buses con servidores públicos y de organizaciones sociales, que se parquearon desde el redondel de la Villaflora (al sur) hasta el sector de Chimbacalle, provenientes de provincias de la Costa, Sierra y Amazonía.

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Muchos de ellos, que habían viajado en horas de la madrugada, se apostaron a lo largo de la avenida Rodrigo de Chávez para desayunar y preparar su marcha.

Los discursos para defender la política laboral del Gobierno y principalmente la Ley para la Justicia Laboral adquirieron matices políticos cuando Hoover Delgado, de la Federación Ecuatoriana de Operadores y Mecánicos de Equipos Camineros (Fedesomec), pidió a Correa “que acepte la reelección”, porque –agregó– “es la esperanza de este pueblo”. Su pedido despertó la algarabía de los asistentes, quienes en varias ocasiones gritaron “reelección, reelección”.

Correa respondió: “Lo que menos me interesa en lo personal es presentarme como candidato nuevamente, solo lo haría en caso extremo, pero con esta multitud (...) estoy seguro de que no va a ser necesario, venceremos compatriotas...”.

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Tras terminar la concentración pasado el mediodía, en la que, además hubo canciones, varias de ellas interpretadas por el mandatario, quienes llegaron a la capital desde fuera, buscaron sus buses que los recogieron en los alrededores de El Cumandá y La Marín para retornar a sus provincias. (I)

Sé bien, que yo ya no soy yo, soy todo un pueblo (...) no estamos aquí por tontas vanidades y peor por ambiciones. Estamos aquí para construir juntos esta patria”.Rafael Correa Presidente