Una nueva agrupación sindical se presentó este martes en Quito, la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) que, según uno de sus representantes, Marcelo Solórzano, contribuirá con el proceso revolucionario del Gobierno de Rafael Correa.

Solórzano leyó un manifiesto en el que la naciente CUT "declara la voluntad de construirla como un frente nacional de trabajadores de todo tipo y condición, del campo y la ciudad, empleados, artesanos, trabajadores autónomos públicos y privados, formales e informales con el objetivo de defender los derechos del trabajo entendido como derecho humano fundamental y proponer nuestro aporte a la construcción de una sociedad del buen vivir".

También dijo que la CUT es el "resultado de un reflexión profunda que la sociedad ecuatoriana demanda del movimiento sindical, con una nueva conducta, postura y con pensamiento joven". Agrupa a 15 organizaciones.

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Y al Frente Unitario de los Trabajadores (FUT) le dijo que tiene "una actitud falsaria y de chantaje", pero que ahora se topará con "la claridad de los trabajadores organizados en esta Central (CUT)".

Liliana Durán, presidenta del Foro Permanente de las Mujeres Ecuatoriana, saludó la creación de la Central Unitaria de Trabajadores "que convoque y represente a los trabajadores ecuatorianos".

Paralelamente, los dirigentes del FUT y de la Confederación Nacional de Indígenas del Ecuador (Conaie) anunciaron el martes que la marcha prevista para el 19 de noviembre está en marcha con el fin de rechazar la política laboral del Gobierno y las enmiendas a la Constitución que promueve el oficialismo.

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Una de ellas, según el FUT, "busca desaparecer al sindicalismo público y atenta a los Arts. 229 y 326 de la Constitución, violando los principios de irrenunciabilidad de los derechos laborales y de libertad de organización de los trabajadores".

Mientras, la nueva CUT se unirá a la marcha que promueve el Gobierno en Guayaquil el próximo sábado, donde anunciará las reformas al Código de Trabajo.