Las adulteraciones de documentos y suplantaciones de identidades en el deporte son un fraude que está afectando principios legales y morales y que perjudica a las bases mismas de esta noble actividad que tienen entre sus principios fundamentales el juego limpio, el respeto a sus reglas y normas.

El escándalo por la participación de jóvenes con mayor edad en la selección del Ecuador en el torneo sudamericano sub-17 ha generado muchos problemas con consecuencias hasta ahora imprevisibles.

Esto de tomar ventaja compitiendo en torneos y campeonatos por edades se da desde hace muchos años y afecta a la mayoría de los deportes en muchos países y de lo cual Ecuador no se escapa.

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Lo preocupante de todo esto es que no se ponen mayores controles para evitarlo, lo que quiere decir que hay muchos responsable, ya sea por acción u omisión.

Alguien propone esta ilegalidad, uno la ejecuta, otros lo aceptan y cuando se descubre, irresponsablemente intentan taparlo en vez de poner correctivos de inmediato.

En algunos casos los padres lo permiten, los directivos lo aceptan y los deportistas no se oponen, porque quizás por su inmadurez, juventud, falta de cultura o carácter no se percatan del alcance de estos ilícitos.

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Muchas personas saben cómo funciona esto, pero no hacen nada para impedirlo. Se cree que son otros encargados de evitarlo y lo están alentado. Los llamados a preservar la pureza del deporte son los mismos que la quiebran.

La lista de transgresores es larga. El legislador Mauro Andino solicitó un informe al Registro Civil del Ecuador de un listado adjunto de 28 futbolistas y dice con mucha preocupación que el organismo estatal como es el Registro Civil se negó a entregar información aduciendo un acuerdo de confidencialidad con la Federación Ecuatoriana de Fútbol. ¿Cuál es el propósito de esconder este ilícito?

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Esto es como intentar tapar este bochorno, que ya trasciende a nivel internacional. Señal inequívoca de que hay poco esfuerzo para corregir de quienes deberían ser los garantes de la práctica pura y legítima del deporte.

En muchas regiones, ciudades esto de la adulteración de documento y suplantación de identidad se ha convertido en un modus operandi con la finalidad de hacer creer que mientras menos edad tenga un deportista, tendrá mayores oportunidades de triunfar.

Hay países en la que de manera expresa los padres registran a los hijos con dos y tres años de retraso para que luego sus hijos participen en torneos con ventaja de dos y tres años y hacer creer que tienen extraordinario talento con lo que suponen conseguir mayores y mejores posibilidades para conseguir contrato profesional.

Pasó en el béisbol dominicano, en el que se llegó a establecer que un gran porcentaje de los peloteros que llegaron a las Grandes Ligas tenían edad distintas a la verdadera. Mayor impacto produjo cuando se comprobó que en los famosos torneos mundiales de Williamsport en 2001, un equipo de El Bronx llegó a las finales en la categoría 11-12 años con la actuación extraordinaria de un lanzador zurdo de origen dominicano llamado Danny Almonte, con una recta muy veloz para su edad y que en la serie final sorprendió a todos lanzando ‘juego perfecto’, ponchó 16 bateadores rivales para propinar una blanqueada de 5-0 ante un equipo de La Florida.

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Esta actuación provocó gran atención y un reportero de Sports Illustrate viajó a República Dominicana, visitó el lugar donde había nacido y la escuela a la que había concurrido y se llegó a establecer que tenía dos años más de lo requerido.

Los directivos tomaron la decisión de borrarlo de los libros el ‘juego perfecto’, se le quitó la tercera ubicación final a su equipo, se expulsó de por vida al representante del equipo y al padre del jugador, quien además debió enfrentar la justicia dominicana por adulteración de documento público y desde entonces los controles son mayores.

Hay organizadores que hacen esfuerzo de controlar las edades. Cuando hay alguna duda exigen apoyo científico como las pruebas radiológicas de la mano izquierda y otros con que puede determinar la edad con los cartílagos de crecimiento, con la intención de no permitir la participación de deportistas con inscripciones tardías.

Se tiene que agotar todo el esfuerzo con el propósito de ejercer mejor control en los torneos por edades para proteger la limpieza y pureza del deporte. (O)

Alguien propone esta ilegalidad, uno la ejecuta, otros lo aceptan y cuando se descubre, irresponsablemente intentan taparlo, en lugar de corregirlo.