El tenista español David Ferrer realizó ayer una de sus mejores presentaciones para superar al número uno del mundo, su compatriota Rafael Nadal, por 6-3 y 7-5 en las semifinales del Masters 1.000 de París y mantuvo vivas sus esperanzas de retener su corona.

Ferrer, tercer favorito y quien ganó su primer título de Masters Series en París el año pasado, enfrentará hoy a Novak Djokovic en la final del evento bajo techo, después de que el serbio doblegó al suizo Roger Federer por 4-6, 6-3 y 6-2 en un enfrentamiento entre dos exnúmero uno del mundo.

Ferrer, quien entró al partido con un registro de 4 triunfos y 20 derrotas frente a Nadal, pero que había ganado su anterior encuentro en cancha dura en el Abierto de Australia del 2011, dominó el partido de principio a fin.

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“Esta pudo ser mi mejor presentación de la temporada”, dijo Ferrer al canal español Teledeporte. “Jugué un partido muy completo y sabía que para vencer a Rafa debía dar lo mejor. Quizás él comenzó un poco nervioso con más errores de lo habitual, pero el segundo set fue realmente duro”, agregó.

La potencia también hizo la diferencia en el partido previo de ayer, cuando Djokovic, campeón en el 2009, venció a Federer a pesar de que tuvo problemas para controlarlo al inicio del encuentro.

El suizo comenzó bien, pero luego perdió la iniciativa después de que empezó a cometer errores y también tuvo problemas con su servicio.