La era de José Mourinho se cerró ayer en el Santiago Bernabéu con más ruido alrededor de su figura que fútbol, y una afición merengue dividida entre el apoyo y el abucheo al portugués, que presenció con grada semivacía el último triunfo del Real Madrid, 4-2 ante el Osasuna, en el final de una mala temporada 2012-2013.

Sin el astro Cristiano Ronaldo ni el arquero Iker Casillas en la cancha o el banquillo, el argentino Gonzalo Higuaín fue el encargado de abrir el marcador a los 35 minutos con su 16º gol del campeonato y quizás el último de los 121 que acumula como madridista, pues también suena como posible baja. Michael Essien anotó su segundo de blanco a los 38m, y Roberto Torres (52m) recortó por Osasuna, que niveló momentáneamente por vía de Álvaro Cejudo (63m). Pero el Madrid finalmente inclinó la balanza gracias a Karim Benzema (69m), y amplió José Callejón (87m).

Mourinho volvió a sorprender dejando fuera de la convocatoria a Casillas –con quien se enemistó– pese a la baja del titular Diego López, y le dio alternativa al joven Jesús Fernández (cuarto arquero) por delante de Antonio Adán.

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El fútbol pasó a un segundo plano. Es la herencia que deja Mourinho, división en el madridismo. Desafíos de los llamados ‘ultras’ (barra brava del Madrid) cantando sin cesar el nombre de Mourinho y siendo respondidos con insultos del resto de aficionados.

“Más pitos (abucheos) que aplausos del público del Bernabéu a Mourinho en su último partido”, dijo ayer el diario AS en su edición digital. Marca señaló: “Lo de menos fue el resultado en un partido en el que el Bernabéu mostró las dos tendencias creadas por la figura del técnico. A favor o en contra, sin matices, sin grises”.

El balance de los del tres años del DT, una liga, una Copa del Rey y una Supercopa es pobre. El juego con la plantilla de mayor presupuesto en la historia del club tampoco mejoró. Y una cuenta pendiente: en la Liga de Campeones el Real Madrid fue tres semifinales consecutivas, pero no pasó de ahí.

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A Mourinho, quien llegó en el 2010, los rumores le sitúan como próximo entrenador del Chelsea inglés, donde ya estuvo del 2004 al 2008. Su nombre se apagará con el tiempo. Es el fin a una era repleta de polémica y con poco éxito deportivo.

 

Deseo a todos los madridistas muchas alegrías en el futuro. Agradezco el apoyo de muchos y respeto la crítica de otros. Desde el corazón, ‘¡Hala Madrid!’ (grito tradicional de ánimo de los merengues)”.José Mourinho Entrenador del Real Madrid