Con la determinación de 6 objetivos, 14 políticas y 59 estrategias, el Ministerio Coordinador de Seguridad Interna y Externa presentó el Plan Nacional de Seguridad Integral.

Los objetivos del plan son: prevenir, combatir y controlar la criminalidad y la violencia; garantizar la soberanía y la integridad territorial; fortalecer la presencia del Estado, especialmente en las fronteras; reducir la vulnerabilidad de las personas frente a desastres naturales; impulsar la investigación científica y tecnológica para la seguridad; y, profundizar la democracia para la seguridad y la convivencia pacífica.

El programa incluye las agendas de los ministerios de Relaciones Exteriores, Defensa, del Interior, Justicia, Derechos Humanos y Cultos. Además, las secretarías de Inteligencia, Gestión de Riesgos, Plan Ecuador, y como miembro la Agencia Nacional de Tránsito.

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El Ministerio del Interior hará el trabajo en cinco grandes ejes: desconcentración de los servicios de seguridad en distritos y circuitos; programa de vivienda fiscal para la Policía Nacional, reestructuración integral del sistema educativo policial, implementación de laboratorios de criminalística e implementación de una nueva red de telecomunicaciones.

“La Policía Nacional contará con una nueva estructura, ya no militarizada, sino civil y comunitaria, en donde a través de la gestión preventiva en circuitos, distritos e investigativa, se hará una rendición permanente de cuentas a los ciudadanos y ciudadanas”, señaló el ministro del Interior José Serrano.

Mientras tanto, el Ministerio de Defensa afianzará el trabajo en la recuperación de la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas, fortalecimiento de los sistemas de Inteligencia, mejoramiento de la Infraestructura de guarniciones militares, neutralización de las actividades ilícitas y asistencia oportuna de emergencias en espacios acuáticos, y protección de la población en el manejo de municiones y explosivos de las Fuerzas Armadas.

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Para el ministro coordinador de la Seguridad, Homero Arellano, a la inseguridad se tiene que enfrentarla con un nuevo enfoque, con una visión integral, participativa, que rebase el criterio policial y militar respecto a la defensa de la soberanía territorial, como tarea única de la seguridad.

Se necesita emprender una lucha integral, conjunta, con todas las instituciones del Estado, pero fundamentalmente en la interacción con la inclusión ciudadana”, enfatizó.