JORGE MARTILLO MONSERRATE
jotamartillo@yahoo.es.- Esa mañana, El Viejo Napo bajó del cielo. Vive arriba en el callejón de Las Ánimas. Desciende con su mandolina atada a la mano. Le disparo unas fotos en el barrio Las Peñas y después vamos al norte tras un cebiche porque Paguay, que durante 43 años ofreció su rico encebollado en el callejón Noboa, ya es difunto.