Una protesta por el bachillerato unificado en establecimientos secundarios del país derivó ayer en enfrentamientos con la policía en el centro de Portoviejo, incluso en las afueras de la iglesia La Merced. El saldo fue dos estudiantes heridos, una alumna con problemas de asfixia y otros cinco retenidos por alterar el orden.

Esta situación se presentó mientras en Quito el ministro del Interior, José Serrano, señaló que de acuerdo con los videos de los medios de comunicación y del sistema Ojos de Águila se cuenta con una posible identificación del policía que pudo haber actuado con excesos, el 15 de septiembre pasado, en la capital, cuando quedó herido el estudiante del Instituto Mejía, Édison Cocíos.

En la capital manabita, estudiantes de los colegios Olmedo, Bruno Sánchez y Paulo Emilio Macías bloquearon calles de la parroquia San Pablo. Pero una hora después estos llegaron a pocas cuadras del edificio de la Gobernación de Manabí, donde la policía empleó gases lacrimógenos contra las piedras que lanzaban los estudiantes.