Edison Fernando Cocíos, de 17 años, estudiante del quinto curso del Instituto Nacional Mejía, se encuentra en coma en el hospital Eugenio Espejo de Quito, producto del impacto de una bomba lacrimógena en su cabeza, la tarde del jueves.

Cocíos participaba en las protestas para exigir una mayor capacitación para los profesores a fin de cumplir con las exigencias del nuevo bachilerato unificado, señalaron  dirigentes estudiantiles.

Según compañeros y familiares de Cocíos, miembros de la policía ingresaron a los predios del plantel y arrojaron bombas lacrimógenas, una de la cuales impactó en la cabeza del joven.

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Manuel Cocíos, padre del estudiante, informó que este se encuentra en coma pues el impacto le provocó un edema cerebral y que aunque está siendo sometido a una nueva cirugía, los medicos señalan que su estado es de suma gravedad y le dan dan pocas esperanzas de sobrevivir.