“Los niños no pueden elegir, usted sí. No fume ni permita que lo hagan delante de sus hijos”, es uno de los mensajes que predominó en las diferentes actividades que se realizaron ayer en la ciudad por el Día Mundial sin Tabaco.

Mientras esperaba el turno para la consulta de sus hijo, en el área de Consulta Externa del hospital Francisco de Ycaza Bustamante, Ramiro Indio junto a otros cincuenta padres de familia recibieron charlas sobre las consecuencias del tabaquismo, que es responsable del 90% de las muertes por cáncer de pulmón.

Para él, “es una falta de respeto que otra persona fume delante de uno. Deben ser sancionados, porque no solo se perjudican ellos, sino también contaminan a quienes están a su alrededor”.

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Escuchando con atención estaba Aracely Tomalá, de 54 años, quien hace cuatro años dejó de fumar. La decisión la tomó porque, comentó, se sentía cansada, tenía los nervios alterados y se desmayaba.

“Estas charlas son importantes para que los fumadores y la comunidad reflexionen sobre esta enfermedad, que a uno lo destruye poco a poco”, señaló.

Con la interpretación cómica de dos fumadores que por tanto fumar fallecen, los alumnos del colegio réplica Vicente Rocafuerte divirtieron a los estudiantes de otras instituciones y a la comunidad que asistió al malecón Simón Bolívar.

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Además se dieron charlas educativas en más de diez stands sobre prevención y las consecuencias del tabaquismo, que afecta a todo el organismo.

Según la Organización Mundial para la Salud (OMS), la nicotina -principal componente del cigarillo- es diez veces más adictiva que la heroína; un cigarrillo menos equivale a 11 minutos más de vida; el consumo diario de un paquete de cigarrillos acorta 6 años la expectativa de vida, fueron algunas de las cifras que informó Kléber Medina, del colegio réplica VR.

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Una de las cifras que asombró a Bryan Briones, del colegio Santiago de las Praderas, es que cada día 80.0000 adolescente ingresan al mundo del tabaquismo.

En la plaza San Francisco, alrededor de 500 estudiantes de medicina de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo entregaron pulseras y volantes informativos, como parte de su campaña Una vida sin humo, que busca concienciar a la comunidad sobre los efectos nocivos de fumar.

Mediante un espirómetro, en el hospital neumológico Alfredo Valenzuela, se midió gratuitamente la capacidad pulmonar de los asistentes.