REUTERS
LA PAZ.- El presidente de Bolivia, Evo Morales, recibió hace doce días un lujoso nuevo avión, de 38,7 millones de dólares, un valor que algunos consideraron exorbitante para la pequeña economía del país, pero hasta ahora no ha podido estrenarlo por falta de piloto.

"¿Dónde está el piloto?", ironizaron medios locales después de que el gobierno admitiera que todavía no había en Bolivia pilotos certificados para el flamante avión presidencial, un Falcon 900EX Easy francés, comprado al contado.

El ministro de la Presidencia, Óscar Coca, dijo ayer que solo faltaba una "certificación final" para que oficiales de la Fuerza Aérea sean autorizados para pilotar el avión, cumpliendo normas de la aseguradora.