Las mujeres pueden reducir su riesgo de cáncer cervical mediante la vacunación y los exámenes, afirma la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. El cáncer cervical o de cuello uterino es provocado por el virus del papiloma humano (VPH).

Una vacuna aprobada por la FDA llamada Gardasil 9 protege de 9 tipos de VPH y puede prevenir un 90% de los cánceres cervicales, de vulva, vaginales y anales, y protege de verrugas genitales. La vacuna está aprobada para su uso en ambos sexos entre los 9 y 26 años.

Las mujeres, incluyendo las que se han vacunado, deben seguir haciéndose frotis de Papanicolaou, porque son esenciales para detectar cambios precancerosos. (F)