La identidad gastronómica de tres países muy distintos se fusionan en un mismo lugar, creando recetas con una explosión de sabor que seduce el paladar del comensal y que se abrió como propuesta de la asociación de Fabián Pérez, Martin Liciardi y Vladimir Toledo Vélez.

Rioko Resto-Lounge, en la avenida Francisco de Orellana, en el c.c. Plaza Orellana (Kennedy Norte), celebra cinco años de funcionamiento, ahora solo con Liciardi y Toledo al frente del restaurante.

“Cuando salíamos se complicaba elegir un lugar porque había esa ausencia de oferta en la ciudad, pero encontrábamos que no había un restaurante en el que uno pueda pedir una pasta, un cebiche, un sushi o carne”, cuenta Toledo.

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En gastronomía está ya todo creado, asegura Toledo, pero la diferencia, recalca, está en personalizar los sabores de cada preparación.

“Normalmente se varía cada seis meses, lo ideal de una carta es que mantenga su esencia y continúe para que la gente la pueda identificar (...) lo que encuentra es evolución, platos que iniciaron de una forma pero que tienen nuevos ingredientes, técnicas y sabores”, agrega.

El ecuatoriano José León, actual jefe de cocina, se ha encargado, junto con los propietarios de crear cada una de las recetas que sirven en el local.

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El lomo Rioko es su plato ícono. Este es un corte de carne al grill en salsa de uva sobre risotto de queso azul.

Otro de los favoritos de sus comensales, indica, es el pollo al grill perfumado en orégano con salsa huancaína y risotto mediterráneo.

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En el rubro de postres, destacan el volcán de chocolate y helado de frutilla, hojaldre de frutas (con jaleas de mora, maracuyá, mango y brunoise de frutilla) y la trilogía de higos (rellenos de mora, salsa de nueces, chocolate y frambuesa acompañados de helados de vainilla bañados con salsa de frutilla).

La atención es de lunes a domingo, desde las 13:00. (I)