Causan curiosidad ciertas noticias internacionales de las que no me entero por los medios más conocidos. Hace casi un año Mauricio Macri asumió la presidencia de Argentina y desde entonces los únicos eventos que llegan del país austral son los supuestos actos de corrupción del gobierno de Cristina Fernández, de sus allegados y de cómo se están llevando los procesos judiciales respectivos.

Pero la situación social de los argentinos me es desconocida, a diferencia de la de los venezolanos, de quienes nos enteramos diariamente de sus pesares. Esto que parece sin importancia tiene trasfondo muy preocupante, ya que cuando Macri era candidato a la presidencia de su país, se presentó como gran salvador de la situación económica y social de los argentinos; medios mercantilistas de Argentina y ciertos medios ecuatorianos mostraban sus virtudes, generosas ofertas de campaña: millones de empleos, eliminación de impuestos, libertad de expresión, etcétera. Programas de opinión daban grande espacio para exponer sus ofertas. ¿Les resulta familiar esto? ¿Nuestros candidatos a la presidencia tendrán suficiente valor para informarnos qué realmente va a suceder en caso de ganar? En la actualidad la situación de Argentina es distinta: a Macri se lo acusa de no cumplir sus promesas, su excusa ha sido la forma en que recibió el Estado; mientras tanto, la lucha de los argentinos por sobrevivir ante los paquetazos del Gobierno ha sido incansable, desde el aumento de tarifas de servicios básicos, despido masivo de miles de personas de entes públicos y privados, traicionar la oferta de campaña de eliminar el impuesto a las ganancias, y hasta la clausura de medios de comunicación, aumento de la pobreza, altos índices de inflación, colocación de jueces a dedo... Las movilizaciones contra estas medidas en Buenos Aires son continuas, pero de nada de esto me entero. Muchos temen que Ecuador se convierta en una próxima Venezuela, también debería dar miedo de convertirnos en una Argentina donde nuestros pesares sean ignorados por la prensa. (O)

Erick Fabián Jaime Murillo, ingeniero comercial, Guayaquil