El 24 de mayo de 2016 el presidente comunicó a la nación que era su “último informe” y que se despedía del país para que descanse de él, pero según la Constitución el último informe a la nación sería el 24 de mayo de 2017, y para salir del país se necesita la autorización de la Asamblea Nacional.

Me parece que existiría una confusión y apuro para dejar el poder, después de las medidas económicas que el Gobierno tomó por la tragedia del terremoto del 16 de abril de 2016 en Manabí y Esmeraldas, y creo que no están resultando positivas para solucionar la crisis económica del país y para reconstruir los efectos negativos ocasionados por el terremoto. Todos los hechos y antecedentes me hacen pensar que la “oposición” y las circunstancias en que se encuentra el país dificultarían la gestión de una revolución y su socialismo. Reflexión, ¿me pregunto por qué querría dejar el poder antes del tiempo establecido por la Constitución? (O)

Ángel Calderón Mayorga,
Economista, Guayaquil