En Guayaquil ante alumnos y maestros del colegio Eloy Alfaro, el ministro de Educación anunció que a partir del próximo año lectivo los estudiantes podrán llevar al colegio sus celulares, puesto que tendrán conectividad, que les permitirá acceso a internet, pero restringiendo las redes sociales, de manera que los puedan usar como herramientas para el aprendizaje.
Los adelantos tecnológicos siempre producen cambios en las instituciones y las escuelas no son una excepción. Sucedió antes, con el proyector, la calculadora, la grabadora y más atrás con el libro que produjo cambios importantes en la transmisión de pensamiento y cultura. La escuela estuvo entonces, como hoy, entre dos presiones: la de conservar lo establecido y la de cambiar. Lo adecuado es descubrir lo conservable y acertar en lo que hay que cambiar.
Sin duda, es un gran reto que solo se podrá afrontar con éxito con la capacitación y actualización de los maestros, que deberán aprender a utilizar con creatividad las nuevas herramientas. Si no es así, los celulares en el aula solo servirán para distraer a los jóvenes.