Hemos visto el video completo de la rueda de prensa que el ministro del Interior, José Serrano, dio a medios de comunicación el jueves 23 de mayo del 2013, de la que además de calificar de falta de claridad, repudiamos la confusión que puede causar la expresión “relación inusual” que Fausto supuestamente mantenía con sus sicarios y victimarios.

Este confuso pronunciamiento no solo daña a una familia entera, sino que también se ensucia la memoria de un destacado periodista que debido a su asesinato ya no está para defenderse. Era público y notorio que, por la defensa de sus inquebrantables principios en el que destacaba la vocación de servir a los demás, especialmente a los más débiles, a Fausto le costó la salida de TC Televisión y por casi tres años no tuvo un empleo fijo. Sin embargo, su espíritu de lucha lo hizo seguir adelante en actividades totalmente lícitas y legítimas como la producción y realización de trabajos audiovisuales; por algunos meses fue asesor parlamentario en la Asamblea Nacional; montó una lavadora de carros al norte de Guayaquil, denominada Te Saco la Mugre; fue asesor de relaciones públicas en el centro comercial Policentro. Los dos últimos meses (marzo y abril del 2013) recibió el sueldo de su contratación en Teleamazonas por ser parte del proyecto ‘Lo sabe, no lo sabe’ que ahí iba a iniciar. Si existía el caso de algún aprieto económico, su madre y familiares le brindaban ayuda, lo cual se puede demostrar documentadamente y, como es lógico, Fausto no dejó bienes ni fortuna, pues vivió sus últimos días con modestia y dignidad. La familia mantiene muchas interrogantes, las cuales exigimos sean respondidas pronto con claridad, apoyadas en prueba plena, no con pruebas que no sean contundentes ni claras. Lo que sí está claro y contundente es la vocación de Fausto de servir a los demás y haber ejercido el periodismo llevando una vida honesta y proba, prueba de ello, la afluencia de centenares de personas en su velorio que demuestra la retribución de toda una comunidad agradecida por su honesto trabajo periodístico realizado durante más de 30 años en el país. La familia rechaza enérgicamente el confuso término “relación inusual” y no descansaremos en hacer respetar el buen nombre y la memoria de Fausto Valdiviezo Moscoso. Recalcamos que la carta escrita con anterioridad por la mamá de Fausto no fue influenciada por ningún periodista, sino inspirada por el sentimiento y dolor de una madre desesperada. Estaremos pendientes del proceso que se llevará a cabo y pedimos que se esclarezca la verdad de los hechos, es decir del asesinato de Fausto y no solamente informar sobre las actividades a las que se dedicaban quienes supuestamente lo asesinaron.

Familia Valdiviezo Moscoso,

Guayaquil