Luego de más de dos horas de deliberar, el tribunal con un voto de mayoría y uno salvado, decidió esta tarde aceptar el testimonio de Álex Bravo como procesado y no como testigo. Bravo fue solicitado como testigo por parte de la Fiscalía dentro del tercer día de audiencia de juzgamiento por el delito de delincuencia organizada relacionada a hechos de corrupción sucedidos, entre 2012 y 2016, en la estatal Petroecuador.

Álex Bravo anticipó que no aceptaría preguntas de ninguna de las partes y pese a que dijo que se referiría en su testimonio a cinco puntos, solo mencionó tres.

Básicamente dijo que los hechos que ha aceptado constan en la sentencia en relación al proceso abreviado en el que ya fue sancionado. Aclaró que conoce a las personas que están siendo procesadas en este caso y reiteró que su participación en este hecho fue como colaborador.

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Además explicó que como ha indicado en procesos anteriores a los que ha sido sometido él "recibió recursos e instrucciones del ingeniero (Carlos) Pareja (Yannuzzelli) para ser entregados a terceros".

El testimonio no duró más de un minuto y debido al anuncio de no aceptar preguntas, tanto Fiscalía, Procuraduría y Petroecuador, quien es la acusación particular en el caso, no hicieron preguntas.

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De la parte acusada únicamente hizo una consulta la defensa de Carlos Pareja Yannuzzelli, Reinado Zambrano. El abogado le consultó a Bravo si la esposa de este fue quien constituyó la empresa Capaya o era representante de la misma. La respuesta fue que no respondería ninguna consulta.

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Tras la negativa a contestar, Zambrano aseguró que "esta es una violación al debido proceso y del derecho a la defensa". Inmedatamente la jueza dio paso al siguiente testigo de la Fiscalia.

Hasta el momento 35 testigos han dado su testimonio en este caso por parte de la Fiscalía. (I)