Actualizado a las 15:30

El terremoto más potente en castigar a México en un siglo deja al menos 58 muertos y decenas de heridos en el sur del país, donde causó mayores daños al derribar algunos edificios y viviendas, según autoridades, que siguen evaluando las zonas más afectadas.

Hasta el momento ha habido 45 fallecidos en el sureño estado de Oaxaca, tres en Tabasco y otros 10 en el vecino estado de Chiapas, informó en Twitter el titular de Protección Civil federal, Luis Felipe Puente.

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De acuerdo con las mediciones del Servicio Sismológico Nacional de México, el temblor tuvo una magnitud de 8.2 y se originó en el mar cerca de Pijijiapan, en el estado Chiapas, a las 23:49 del jueves, a una profundidad de 58 km.

ACTUALIZACIÓN: SISMO Magnitud Mww 8.2 Loc. 133 km al SUROESTE de PIJIJIAPAN, CHIS 07/09/17 23:49:18 Lat 14.85 Lon -94.11 Pf 58 km

El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) señala que el sismo fue de 8.1.

Fue el más fuerte en tres décadas, y derrumbó un hotel, destruyó paredes, rompió vidrios y cortó el suministro eléctrico en zonas del país.

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"Es importante subrayar que se trató de un sismo de gran escala y de gran magnitud ... El más fuerte y la mayor magnitud que se haya tenido al menos en los últimos cien años en la historia de nuestro país", dijo el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, en un informe a periodistas por la madrugada.

Una de las zonas más afectadas por el movimiento telúrico fue el municipio de Juchitán, en el estado sureño de Oaxaca, que tiene costas en el Pacífico.

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El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, dijo este viernes que en el estado habían fallecido 23 personas, pero aclaró que las cifras son preliminares.

Otras siete personas murieron en el estado de Chiapas, el más cercano al epicentro y el más afectado por el movimiento, mientras que dos niños fallecieron en el estado de Tabasco, dijeron autoridades.

Un hotel se derrumbó en una localidad de Oaxaca y se reportaban heridos.

Población en alerta

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El sismo tuvo la misma magnitud que el devastador terremoto que en septiembre de 1985 sacudió a la Ciudad de México y dejó miles de muertos. Y hasta la mañana del viernes se habían registrado 185 réplicas.

"Estamos en alerta, estamos atentos y haciendo una valoración completa que puede tardar días", dijo el presidente Enrique Peña Nieto, advirtiendo que podría haber una réplica fuerte en el lapso de 24 horas de ocurrido el terremoto.

Habitantes en la capital salieron corriendo a las calles, según testigos de Reuters, pero las autoridades dijeron que sólo cayeron unas bardas y se cortó la electricidad en algunas zonas.

Las autoridades suspendieron las clases en varios estados del país para revisar la infraestructura escolar y los aeropuertos trabajaban con normalidad.

La petrolera estatal Pemex suspendió temporalmente y de forma preventiva las operaciones en su refinería de Salina Cruz en Oaxaca para evaluar posibles daños.

Aunque el epicentro del terremoto se ubicó en el mar, 123 kilómetros al suroeste de la ciudad de Pijijiapan y a una profundidad de 33 kilómetros, se sintió en una región con 50 millones de habitantes que abarca varios estados, de acuerdo con el presidente, e incluso en otros países de Centroamérica.

El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico confirmó que el sismo desató un pequeño maremoto en México. "El riesgo de tsunami en las costas de Chiapas no representa un riesgo mayor", dijo Peña Nieto a la cadena local Foro TV. (I)