“¿Quién le constituye la empresa a Capaya? Álex Bravo, o acaso los hijos del señor Carlos Pareja Yannuzzelli forman parte del directorio de esa empresa o son beneficiarios. ¿El beneficiario es Carlos Pareja Yannuzzelli? Sí, porque Álex Bravo le regaló la compañía con todo y plata. Así fue y por eso la existencia de Capaya”.

Ese fue parte del alegato que presentó ayer Reinaldo Zambrano, abogado del exgerente de Petroecuador Carlos Pareja Yannuzzelli, dentro de la audiencia de apelación a la sentencia de cinco años que recibieron el exfuncionario y nueve personas más a las que se les encontró como autores del delito de cohecho en Petroecuador.

Si bien Zambrano reconoce que su cliente recibió dinero, aclara que este no fue entregado por contratistas, sino por la offshore Girbra, de Bravo. Para él, este hecho significa que aquí existiría cualquier otro tipo de delito, pero no cohecho.

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Al fiscal de la causa, Juan Carlos Zúñiga, la teoría del supuesto “regalo” le llamó la atención, más aún –dijo– cuando en el expediente consta que fue el mismo Pareja Yannuzzelli quien creó la cuenta de Capaya en el Helm Bank de Panamá y aparece como el accionista y el beneficiario de la offshore.

Zambrano concluyó que si el Tribunal considera que existe cohecho en la actuación de Pareja Yannuzzelli, se debe aplicar el principio de favorabilidad para el reo. Es decir, la sanción de uno a tres años que consta en el Código Penal Integral vigente o en el anterior. (I)