Es un anhelo de los pobladores de la parroquia Juan Gómez Rendón, más conocida como Progreso, a 65 kilómetros de la ciudad, que empieza a concretarse. La avenida Pedro Pablo Viteri, la principal arteria de este sector rural, es intervenida como parte de un proceso de regeneración urbana.

La obra del Cabildo porteño implica la construcción de aceras, bordillos, cunetas, adoquinamiento y señalización horizontal y vertical.

A estas mejoras se suman la implementación de áreas de descanso, arreglo de fachadas y pintada de las viviendas, así como áreas verdes e instalación de agua potable, alcantarillado sanitario y pluvial.

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Los trabajos que empezaron a mediados de junio pasado se entregarán en un plazo de 300 días, según el Municipio.

El proyecto civil en ejecución tiene un costo de 838.235 dólares y está a cargo del contratista Jorge Luis Malo Romero. (I)