Tomando la pala con fuerza, con mucha concentración para poner un poco de tierra en un hoyo, Rafaela Calderón, estudiante de segundo de bachillerato del colegio Delta, se prepara para plantar un algarrobo, que mide unos 2 metros, en una de las áreas verdes del plantel.

Esta fue una de las 25 especies nativas que unas 40 estudiantes, de preescolar hasta bachillerato, plantaron, el pasado lunes, en alusión a los 25 años de vida institucional del colegio.

Para la siembra el colegio contó con la colaboración de Fundación La Iguana, que además de servir de guía para la plantación de las especies, también impartió charlas a las alumnas sobre el cuidado de la naturaleza, el trato a las plantas y el cambio climático.

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Además de los 25 ejemplares nativos como guayacán rosado, cascol y caoba, la fundación donó un árbol de palo santo a cada promoción, fueron 15 en total.

“Pensamos en esta actividad con el fin de concienciar a las chicas a conservar el medio ambiente, inculcándoles el respeto a la naturaleza; utilizando especies adecuadas para este ambiente y clima”, dice Roxana Castillo, rectora.

“Me parece importantísimo que los chicos comiencen a vincularse con estos temas desde pequeños, porque la protección del ambiente y tener una mejor ciudad viene de la mano de la educación y el respeto hacia la naturaleza que se les inculca desde niños”, dice Andrea Fiallos, presidenta de la fundación.

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El colegio fue fundado por un grupo de padres de familia con autogestión y contribuciones especiales.

Abrió sus puertas los primeros días de mayo de 1991. Durante el año lectivo 2016-2017 se han realizado varias actividades con el tinte de esta celebración. (I)