Observar a tres perros encerrados en el interior de un vehículo estacionado en las inmediaciones del edificio World Trade Center la mañana de este miércoles alteró a varios ciudadanos.
El malestar ciudadano se dio porque los perros grandes, encerrados, ladraban desde el interior de una furgoneta estacionada en las afueras del Servicio de Rentas Internas , en la av. Francisco de Orellana.
Transeúntes, vendedores informales y hasta un policía metropolitano criticaron al dueño de las mascotas por dejarlas abandonadas y sin una abertura en las ventanas para que respiren.
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El uniformado llamó al 911 pero solo le dijeron que llame a otro número.
Las personas le pedían que rompa una ventana del carro para ayudar a los animales, pero el metropolitano respondió que era propiedad privada y temía que lo despidieran y le cobraran por el daño.
La angustia y desesperación de las personas se consignó en las redes sociales para conseguir ayuda y evitar este maltrato a los animales. (I)