Un grupo de guías penitenciarios que en el 2010 fue investigado por supuestos actos de corrupción recibió la absolución. Los servidores fueron procesados por supuestamente permitir, a cambio de dinero, el ingreso de sustancias sujetas a fiscalización a la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil.

En noviembre de ese año la entonces directora nacional de Rehabilitación Social, Alexandra Zamárraga, impulsó la indagación en contra de los guías con base a videos.

José Serrano, ministro de Justicia de la época, remarcó la existencia de aquella presunta prueba y sostuvo que la investigación “de una cadena de irregularidades” en el reclusorio llevaba seis meses.

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Algunos servidores fueron detenidos en la Penitenciaría del Litoral, cuando estaban de turno y en medio de un operativo policial que se extendió por varias horas.

Durante estos años el proceso ha pasado por varias etapas en las que hubo apelaciones de la Fiscalía.

Estado de inocencia
En una resolución de julio de 2012, el Décimo Tribunal de Garantías Penales del Guayas declaró “el estado de inocencia” de 15 servidores penitenciarios al considerar que no hubo pruebas suficientes.

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Un guía que fue procesado y luego absuelto señaló: “Hemos demostrado hasta la saciedad y ante las autoridades competentes que no tuvimos nada que ver en el hecho que fue sujeto de un proceso legal”.

Como sustento, él anexó el fallo del tribunal en mención y una resolución de la Segunda Sala de lo Penal, que ratifica lo resuelto por el primer organismo judicial. (I)

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Investigación
Reclusorio

Presunta extorsión
Cuando se cumplió con la detención de los guías penitenciarios, en el 2010, las autoridades de entonces los vincularon con una red dedicada a la extorsión de las personas privadas de libertad.

Personal antiguo
Los servidores detenidos eran considerados personal antiguo del reclusorio. Con su salida, las plazas fueron llenadas con aspirantes al cargo. Había un proceso de selección en curso.