“Que no era horario de visitas”. Esa habría sido la respuesta que le dieron funcionarios del Centro de Detención Provisional, la mañana del sábado, al asambleísta de Pichincha Andrés Páez (CREO), para no permitirle el ingreso para ver a Diego Alvear y Diego Zapatier, ambos sancionados con cinco días de cárcel por supuestas agresiones verbales contra miembros de la Policía, durante la marcha del jueves último en Guayaquil.

Páez llegó a Guayaquil para expresarles su solidaridad: “Hay que alentarles a seguir en la lucha contra la tiranía”, sostuvo al tiempo que asegurar que él había revisado la web para confirmar que sí existían visitas ese día desde las 08:00.

El abogado de los detenidos, Juan Vizueta, dijo que tampoco lo dejaron entrar: “Se está violando una garantía constitucional, el hecho de que ningún ciudadano puede ser incomunicado. Todos los ciudadanos deben tener un contacto directo y permanente con su defensor”.

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Agregó que le indicaron que ese sábado solo se podía visitar a contraventores de tránsito y que los abogados debían tener un permiso por escrito.

A Vizueta y Páez les preocupa la situación médica de Alvear. Su defensor dijo que tenían dos días de no saber sus condiciones y que posee varias dolencias, una es un problema de depresión crónica y del cual tenían conocimiento las autoridades. Pese a ello, según Vizueta, esa mañana de sábado tampoco se le permitió a la familia para entregarle medicinas.

Para Páez, esas detenciones son una excusa para detener a los que protestan y amedrentar al resto de manifestantes. (I)

La celda que encierra a presos políticos Diego Zapater y Diego Alvear no será mordaza para su espíritu de lucha... ”. Andrés Páez, asambleísta