El próximo domingo vence el plazo para que el Ejecutivo presente a la Asamblea la proforma presupuestaria 2016.

Ayer, el Ministerio de Finanzas precisó que el monto de la proforma será de $ 29.900 millones, cifra superior a la anunciada por el presidente Rafael Correa el miércoles pasado.

El primer mandatario había informado, al finalizar el debate económico televisado, que sería de $ 25.700 millones.

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Sin embargo, el Ministerio precisó que a esta cantidad hay que sumarle $ 4.200 millones que se requerirán para el pago de amortizaciones y otros pasivos previstos, como la preventa petrolera.

El presidente Correa también adelantó que el precio de referencia del crudo en el que se basó la proforma es de $ 35, es decir, menos de la mitad en lo que se calculó el año pasado: $ 79,7 el barril. Así, la nueva proforma cae en 17,67% respecto de la aprobada en 2015 y que ascendía a $ 36.317 millones.

De otra parte, Correa dijo que el ‘área’ que se afectará con la reducción del presupuesto es el programa de inversiones.

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“Siempre dijimos que en caso de problema, la variable de ajuste iba a ser el programa de inversiones”, declaró en un conversatorio en Guayaquil.

Esto implicará que en el 2016 ‘solo’ se completarán los proyectos ya iniciados y que no se planificarán nuevos, explicó.

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También reiteró que se reducirán las asignaciones a los Gobierno Autónomos Descentralizados (GAD).

Estimó que esa reducción sería de un 12% menos que este año, pero aclaró que el cálculo de las rentas “depende del precio del petróleo” y que su fórmula consta en una ley.

Analistas consultados no creen que esta disminución será suficiente para enfrentar la nueva realidad económica del país, en la cual habrá menos ingresos tanto petroleros como tributarios.

Para Jaime Carrera, secretario ejecutivo del Observatorio de la Política Fiscal, el presupuesto del 2016 no refleja una notable reducción en el gasto del sector público. Más bien se mantendría en los niveles del presente año. (I)

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