Una enorme puerta de madera en la calle Julián Coronel resguardaba a inicios del siglo XIX las tumbas del cementerio de Guayaquil. Ahí se vislumbraban cruces en medio de un pasillo que desembocaba en una capilla de madera situada en las faldas del cerro del Carmen.

Es el relato del arquitecto Roberto Wong, jefe de Operaciones del cementerio, en alusión a los inicios del camposanto, en la actualidad categorizado como patrimonial y que hoy cumple 192 años de inauguración.

Su expansión reflejó el poder adquisitivo de los guayaquileños. El estrato alto contrataba arquitectos y escultores italianos para edificar impresionantes mausoleos; la clase media ocupaba bóvedas construidas a manera de condominio; y la de bajo poder adquisitivo enterraba a sus difuntos en el cerro.

Publicidad

El Cementerio Patrimonial de Guayaquil no es considerado solo la última morada de miles de personas sino un museo que guarda innumerables historias de personajes de la ciudad, las que ahora se promocionan a través de cuatro rutas turísticas dentro de las instalaciones.

El Instituto Nacional de Patrimonio Cultural definió recorridos. En la ruta Bajo el cielo del recuerdo, el visitante realiza un paseo por el camposanto para conocer orígenes de la infraestructura y datos de quienes descansan en sus predios.

La ruta Memorias y el vuelo de los ángeles exhibe esculturas que fueron construidas por artistas italianos que arribaron a Guayaquil en los años veinte, la mayoría de ellas esculpidas por Enrico Pacciani, quien dominaba la estatuaria en mármol y se distinguía por la perfección en los rasgos de sus creaciones.

Publicidad

Entre la grandeza y la huella eterna es la ruta de los próceres. Se llega a tumbas de íconos como José Joaquín de Olmedo, Rafael Ximena, Gral. José Villamil Jolly, Almirante Juan Illingworth Hunt y Manuela de Jesús Garaycoa y Llaguno.

La ruta Tras la sombra del último verso incluye a poetas como Medardo Ángel Silva, Numa Pompilio Llona, Dolores Sucre; escritores como José de la Cuadra Vargas, José Joaquín Gallegos Lara y a artistas populares de la talla de Julio Jaramillo Laurido, Nicasio Safadi Reves, Tito del Salto Delgado y María Mendoza Montiel.

Publicidad

En total son 255 elementos patrimoniales entre mausoleos, monumentos, sarcófagos, bóvedas, nichos, cuerpos de bóvedas, puertas y estatuas.

José Luis Salazar, inspector del cementerio, señala que entre junio y julio próximo se publicará un libro con texto y fotografías que reseñan la historia, riqueza cultural y oferta turística del camposanto.

Así el Cementerio Patrimonial de Guayaquil busca posicionarse como uno de los principales destinos turísticos de la ciudad y de todo el país. (I)

Junta de Beneficencia
El cementerio está regentado por la Junta de Beneficencia de Guayaquil desde 1888.

Publicidad

(fotos: Ángel Aguirre, EL UNIVERSO)