Los cuestionamientos del gobierno de Rafael Correa a las caricaturas de Xavier Bonilla (Bonil) o a las burlas del comediante John Oliver, así como el cierre de la cuenta de Crudo Ecuador en Facebook y las suspensiones de otras de opositores en Twitter, serían nuevos síntomas del estatus de la libertad de expresión en Ecuador.

“De un lado, la sociedad que aboga por el libre ejercicio de la palabra y hasta del humor, y por el otro, el oficialismo, con una campaña que busca silenciar y desprestigiar ya no solo a los medios de comunicación sino a quien ejerce opinión o creen, según esa visión, que hacen oposición”, señala el informe preliminar de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), divulgado con motivo de la Reunión de Medio Año, que se realiza en Panamá desde el viernes pasado y que termina hoy.

Lea aquí: Informe completo de la SIP sobre Ecuador

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Según el reporte, la Superintendencia de Comunicación (Supercom) y el Consejo de Comunicación (Cordicom) ecuatorianos han dispuesto a los medios: 5 amonestaciones, 8 multas, 4 rectificaciones, 4 réplicas obligatorias, 4 disculpas obligadas, 7 amonestaciones escritas, 2 suspensiones de frecuencias radiales y 3 réplicas.

De 37 medidas disciplinarias impuestas en los últimos cinco meses, 16 fueron para estaciones radiales, 11 para la prensa escrita, 8 para canales de televisión, una para un caricaturista y una para un alcalde.

En el informe cita, por ejemplo, la salida del aire de los programas “La pareja feliz” y “Vivos” y la sanción por “linchamiento mediático” pedida por el presidente de la Federación de Fútbol, Luis Chiriboga.

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Crudo Ecuador y John Oliver

Del mismo modo, registra el eco internacional de los conflictos del comediante John Oliver y de Crudo Ecuador con Correa. “El silenciamiento del humor tuvo su corolario con la salida del aire de la página de Facebook Crudo Ecuador el 19 de febrero”, luego de que su administrador denunció haber recibido amenazas en contra de su vida y de su familia.

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Además, el informe describe que “cuatro cuentas de tuiteros activistas críticos al régimen fueron cerradas por pedido de la empresa española Ares Rights, la misma que en ocasiones anteriores a nombre del canal público EcuadorTV, ha logrado bajar de YouTube videos incómodos para el Gobierno”.

La SIP, no obstante, recoge las versiones del superintendente de Comunicación, Carlos Ochoa, y del secretario de Comunicación, Fernando Alvarado, sobre la posibilidad de regular, por ejemplo, el anonimato en las redes sociales.

El presidente de la SIP, Gustavo Mohme, aprovechó el caso de Ecuador para señalar que “en varios países se está legitimando la censura” y, en este caso, por el uso de la Ley de Comunicación para censurar y sancionar. (I)

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Lo que se sabe

Venezuela
Para la SIP, el poder comunicacional del Estado venezolano es indiscutible, lo que conlleva a un desbalance con respecto de “los pocos medios independientes a quienes les cuesta sobrevivir en medio del deterioro institucional, social y económico”. Además, es casi nulo el acceso a la información oficial, pues se reduce a lo que declaran, sin interpelación, verificación o contrastación, los funcionarios del régimen. La censura previa, mediante la legislación o la adquisición de medios, “doblega las líneas editoriales”, señala en su informe. (I)

Estados Unidos
Durante la presidencia de Barack Obama aumentaron los procesos por filtraciones a la prensa, señala la SIP. “Las advertencias y citaciones a periodistas han sido una de las principales preocupaciones”. En ocasiones el Departamento de Justicia ha emitido citaciones para conocer la identidad de fuentes confidenciales y obtuvo, en secreto, registros telefónicos de periodistas y editores de la agencia AP. Bajo la Ley de Espionaje, encausó al periodista James Risen, por reservar su fuente, aunque en diciembre pasado desistió. (I)