Las conclusiones presentadas por Dinased no son compartidas por varios familiares de personas desaparecidas quienes creen que sus seres queridos no pudieron desaparecer por voluntad propia.

Alix Ardila, madre de Carolina Garzón, desaparecida en Quito en abril de 2012, dijo que en su caso era imposible creer que su hija decidió abandonar el hogar por decisión propia. “Si ese fuera el caso ya la habríamos encontrado, pero aquí ya vamos tres años sin respuestas”, señaló.

Telmo Pacheco, quien no ve a su hijo desde el 3 de noviembre de 2011, dijo que este (Telmo) era un hombre alegre, responsable que no tenía razón para irse de la casa. “Deben investigar y determinar las reales causas de su desaparición”, manifestó. (I)