En sus dos primeras décadas, el desamparo ciudadano y la insalubridad eran prácticamente los sellos en los Guasmos. No por nada en el argot político algunos personajes aún dicen: “No solo miren a Guayaquil del centro, vayan a los Guasmos y vean cómo viven”.

Aquellos escenarios quedaron en el pasado, aseguran dirigentes barriales y moradores del populoso sector, que esta semana festejó sus 40 años de asentamiento en el manglar.

Entonces, el agua putrefacta yacía en zanjas al pie de casas, las calles eran lodosas, “todo era pampa”, evoca Yolanda Ugalde, quien vive en la coop. Virgen de Montserrat, Guasmo central, desde la década del setenta.

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“Íbamos con un tachito de agua para lavarnos los pies, nos secábamos y cogíamos el bus allá”, recuerda Ugalde, quien relata que se abastecían de agua a través de los tanqueros que llegaban a la avenida principal: la Raúl Clemente Huerta.

Esa vía y otras como la Abdón Calderón, Adolfo H. Simmonds y Roberto Serrano conectan el Guasmo con el centro de Guayaquil. Los buses de la Metrovía y la ampliación de rutas de las líneas urbanas 13, 16, 103 y 62 facilitan los traslados.

Los moradores recuerdan que al pie de la Playita del Guasmo había ganado, pero pronto el monte y los riachuelos se fueron cubriendo de casas.

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Fue 1975 cuando se dio la primera toma organizada de tierra y posterior fundación del Guasmo, hoy pavimentado prácticamente en el 100 % y con una población de alrededor de 350 mil habitantes.

José Núñez, director de Urbanismo, Avalúos y Catastro del Municipio, cree que el cambio del Guasmo es palpable y califica al sector como una ‘ciudad dentro de una ciudad’.

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“Física y estéticamente es producto de asentamientos ilegales que se han ido consolidando con servicios de infraestructura básicos”, menciona el funcionario.

Esta Dirección registra que desde los años sesenta han llegado a la ciudad un promedio 5.000 familias al año, las que han ocupado un promedio de 140 hectáreas al año.

En el Guasmo hay 50 instituciones educativas, una maternidad, más de 30 centros de salud (entre municipales, fundaciones, centros privados y del ministerio), un mercado y un hospital en construcción.

Entrando por la av. Domingo Comín, los visitantes pueden dividir al Guasmo en tres grandes zonas.

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El Guasmo sur, alberga a dos lugares emblemáticos y turísticos. La iglesia de Stella Maris, donde el papa Juan Pablo II ofició una misa en 1985; y la Playita del Guasmo, que fue construida en el 90 por Rodrigo Borja, según cuenta Pedro Pablo Castillo, dirigente barrial de la coop. San Filipo, quien guarda la memoria del evento en un recorte de periódico del 11 de febrero de 1990.

La actual administración municipal convirtió a la Playita en un punto turístico local.

En el Guasmo central, justamente en el cruce de las avs. Raúl Clemente Huerta con Abdón Calderón existe el sector ‘Las 5 esquinas’, el corazón del Guasmo, donde a cada minuto palpita el comercio. Sana Sana, California, Artefacta, Tía, Banco Bolivariano son varios locales que proveen servicios.

Los moradores degustan allí lo popular y tradicional como la fritada y los quesos.

El comercio y la pesca también ponen sus motores cada día en el río Guayas. Entrando por la av. Adolfo H. Simmonds, yendo hacia el río Guayas, se divisa la av. Galo Plaza, arteria que atraviesa las cooperativas 10 de Agosto, 24 de Mayo, 5 de Agosto, Galápagos, entre otras.

Se observan decenas de embarcaciones al pie de las casas, evidencia de que los pescadores han vuelto de sus faenas.

La venta de pescado, de moluscos, de cualquier producto del estero, es el sustento de familias ribereñas. Los compradores van y vienen con sus fundas. Es el comercio en el ramal del Guayaquil. (I)

Apuntes
Guasmo

Zanjas y descuido
En zonas como la cooperativa Derecho de los Pobres, Luis Chiriboga, Unión de Bananeros, Cristal, 5 de Agosto, el Pedregal, son algunas de las zonas donde se observan lugares sin mantenimiento.

Según DUAR
Desde antes de los años 60 han llegado a la ciudad un promedio 5.000 familias al año que han ocupado un promedio de 140 has de tierras al año.

 

Aquí en La Playita es donde más plata ha habido porque ha venido el boom del camarón y la pesca. Ha habido sus tiempos en que todo el mundo es millonario”.Pedro Pablo Castillo Dirigente de la coop. San Filipo, del Guasmo sur.