El sismo de 5,1 grados en la escala de Richter que hace una semana sacudió Quito y sus alrededores, dio un giro radical a la vida de 83 personas que fueron evacuadas de sus viviendas y ahora se encuentran en albergues temporales.

Julio Díaz es uno de ellos. A sus 61 años abandonó su casa en Pomasqui, luego de que los técnicos del Municipio de Quito le dijeran que debía ser demolida antes de que se desplome y dañe otras viviendas. Cuatro casas más pasarán por ese proceso por tener daños irreversibles.

Ayer, Díaz volvió al taller de carpintería en el que trabaja, después de una semana de incertidumbre. Pero cerca de las 11:30 regresó al albergue que fue activado en la casa parroquial de Pomasqui, donde están asiladas 37 personas de un total de 11 familias. “Nos están dando el desayuno y la merienda. Para el almuerzo muy pocos están aquí. La mayoría salimos a trabajar, a rondar la casa que está abandonada. Hemos recibido atención médica y estoy superando lo de mi casa”, dice.

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De acuerdo con información proporcionada por el alcalde de Quito, Mauricio Rodas, hasta ayer hubo 2.620 reportes ciudadanos sobre viviendas que resultaron dañadas por el sismo. La cifra aumentó luego de la fuerte réplica de las 11:30 del sábado que tuvo una magnitud de 4,7 grados.

Pilar Guañuna y sus dos hijas también están albergadas en Pomasqui. Ella pide a las autoridades una pronta solución ya que su casa está en la zona por donde pasará la prolongación de la av. Simón Bolívar y aún espera que se le entregue el dinero de la expropiación para buscar dónde vivir. “Tuve que dejar mi trabajo de medio tiempo, mi hija mayor es señorita y aquí (en el albergue) no podemos ni cambiarnos de ropa con tanta gente”, aseveró.

Entre los moradores de las seis parroquias rurales declaradas en emergencia, por su cercanía al epicentro del sismo del 12 de agosto, también hay malestar por los rumores de que se produciría un gran terremoto y que debían evacuar. Al respecto se conoció que la Policía investiga el origen de estas versiones que alarmaron a los ciudadanos el sábado, en especial a través de las redes sociales.

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El ministro del Interior, José Serrano, aseguró que este tipo de información errónea va a ser considerada un delito o incluso catalogada como sabotaje, tipificado en artículo 345 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) y establece penas que pueden llegar a los 10 años de privación de la libertad.

83
Personas fueron evacuadas de sus viviendas

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Detalles
Eventos

Espectáculos
El Municipio de Quito levantó ayer la restricción de eventos masivos públicos y deportivos en la capital.

Réplicas
La última fue a las 13:37 de ayer con 1,9 grados de magnitud, según el Instituto Geofísico. El tiempo entre réplicas es cada vez más espaciado.

Vía cerrada 3 días
Anoche, en su cuenta de Twitter, la Secretaría de Gestión de Riesgos indicó que, por trabajos, la ruta Collas-Guayllabamba estará cerrada por tres días, de 20:00 a 05:00. Y la AMT de Quito publica, en la red social, un mapa de desvíos.

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