El excomandante de Policía Carlos Poveda y el coronel Eduardo González (prófugo), quien lideró el operativo en la Farmacia Fybeca en el 2003, fueron llamados a juicio junto con otras 16 personas por un supuesto delito de asesinato por ejecución extrajudicial de ocho ciudadanos, dentro del caso conocido como Las Dolores.

Esta decisión fue adoptada ayer por el juez de la Sala Penal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ), Jorge Blum, en la que además sobreseyó a cinco exjueces de la corte policial y a un exfiscal, por considerar que no existen elementos de convicción que determinen su participación en el caso.

“Sería violatorio... que se les procese por el delito de asesinato..., y se los acuse pidiendo un auto de llamado a juicio por un delito diverso..., tratando de ajustar su accionar a un delito en el que no han participado y que probablemente hubieren cometido por el error judicial”, mencionó el juez.

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La decisión de Blum se apartó del criterio de la Fiscalía, que acusó de encubridores a los jueces por absolver a los procesados y permitir que el delito quede en la impunidad.

Según la decisión del juez, nueve acusados fueron convocados a juicio como autores de asesinato bajo la modalidad de ejecución extrajudicial como una grave violación a los derechos humanos: ocho fueron declarados cómplices y uno, encubridor. De los llamados a juicio, siete están prófugos.

El general Poveda defendió su inocencia y calificó de nefasta la resolución del juez Blum. “En la Comisión de la Verdad ya sabemos quiénes están. Estas pseudocomisiones que odian a los policías. Los delincuentes del ayer... hoy son condecorados por la Asamblea Nacional y los policías honestos que luchamos para que el país no caiga en la subversión hoy estamos perseguidos y enjuiciados”, dijo.