Tenía dos meses practicando crossfit cuando Roberto Luna, de 29 años, sufrió una tendinitis en el hombro derecho. “Me lesioné, porque al principio uno se acompleja al ver que otros pueden levantar más peso que uno”, explica después de una competencia interna en el local de Lacosta Crossfit, en el norte de la ciudad, el sábado pasado.

Por orden de su médico, el hombro de Roberto debió descansar dos meses, tiempo en el que hacía ejercicios suaves y tenía “prohibido levantar peso”.

Los hombros, las rodillas, los tobillos y la zona lumbar (parte baja de la espalda) son los puntos más sensibles a lesiones para quienes practican el crossfit, un programa de entrenamiento físico que surgió en el 2001 en Estados Unidos para formar a policías, marinos o bomberos.

Publicidad

En Ecuador hay al menos treinta sitios legales, 14 de ellos en Guayaquil, donde se realiza el crossfit, un sistema de ejercicios variados que combina levantamiento de pesas con salto de cuerda, flexiones de pecho, suspensión en barras, salto alto, colgarse de sogas o rutinas de gimnasia olímpica.

El traumatólogo Arturo Maya no llegó a probar todas estas variantes del crossfit, porque asegura que después de un par de sesiones, a las que acudió con su hijo, nunca más quiso volver. “He tenido lesiones respiratorias por agotamiento físico, por no estar preparado. Me he querido morir, porque no te dicen lo que tienes que hacer; le enseñan lo mismo a una mujer que a un hombre, a un joven de 15 que a uno de 50”, comenta.

Maya, del Centro Especializado del Pie y del Tobillo, en la Clínica Alcívar, atiende cada mes a unos tres lesionados por el crossfit, la mayoría porque se extralimitan con los ejercicios o porque no están preparados ni protegidos. “He visto lesiones de rodilla, tobillo y hombros; lo más común, si no hacen calentamiento, son los problemas lumbares, por el peso que levantan”, explica Maya.

Publicidad

Con él coincide el traumatólogo Bozidar Vodopivec, del Centro Integral del Pie, en la Clínica Kennedy. “Los que hacen sentadillas y patean pueden hacerse una hernia discal”.

A estas lesiones se suman los desgarros musculares en pantorrillas, bíceps o tríceps, indica Tyrone Flores, presidente de la Federación Ecuatoriana de Médicos del Deporte. “Hay mucha gente que hace esto sin tener conocimiento de su condición física. No lo puede hacer todo el mundo, cada uno tiene condiciones innatas para cada actividad”, señala Flores.

Publicidad

Al mes él atiende en su consultorio, en Urdesa central, a unos seis lesionados por el crossfit, una práctica que él ve lejos de ser una disciplina deportiva. “Lo veo como novelería”, comenta.

Los tres médicos recomiendan que los gimnasios que ofrecen cross-fit deben contar con un protocolo de evaluación médica. “Si alguien que tiene el azúcar subida hace estos ejercicios, le puede dar un colapso, se puede desmayar”, dice Vodopivec.

Sin embargo, las normas que rigen a los gimnasios solo contemplan dos requisitos: el permiso del Cuerpo de Bomberos y el certificado de salud de quienes laboran ahí, según la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria.

Los propietarios de dos gimnasios dijeron que cuentan con un botiquín de primeros auxilios y que si ocurre una emergencia, se acude al hospital más cercano. Además explicaron que los ejercicios se hacen de manera escalonada y por etapas. “Es irresponsable pensar que a un alumno el primer día le voy a poner a armar una barra y decirle quiero que levantes tanto peso”, recalca Nelly Rodríguez, instructora de Horda Crossfit y embarazada de seis meses. “Ya no entreno para competir. Todo lo hago con la supervisión médica y de mi entrenador, que es mi esposo”.

Publicidad

Nelly considera que las lesiones son inevitables en cualquier deporte. Ella misma asegura que alguna vez se lastimó la espalda, pero recalca: “son gajes del entrenamiento”.

Roberto Luna, en cambio, después de su lesión, se protege más, y Mario Barone, de 21 y quien sufrió una contractura de hombro, aconseja a los novatos “dejar el ego en la puerta”.

Antes del crossfit hay que hacerse un examen cardiovascular, para no exigirle al corazón y quemarlo antes de tiempo”.Bozidar Vodopivec Traumatólogo