Con la condición de que cambien de actitud y no generen nuevos incidentes, el Consejo Nacional Electoral (CNE) permitiría al colectivo YASunidos acreditar a 200 de sus miembros para que realicen la veeduría de verificación de firmas que den paso a una consulta popular sobre el Yasuní.

Esto luego de que el viernes pasado los ecologistas fueran impedidos de ingresar al inicio de revisión de formularios, por no haber acudido a una capacitación que se realizó el 16 y 17 de este mes.

El anuncio lo hizo ayer el vicepresidente del organismo, Paúl Salazar, quien volvió a acusar a los ambientalistas, que se oponen a la extracción petrolera en el Parque Nacional Yasuní, de intentar inducir al error.

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El notario 54 del cantón Quito, Jorge Balarezo, abrió el cartón que contenía las copias de las cédulas de los recolectores de firmas acreditados por el colectivo.

El funcionario puso especial atención en los documentos de identificación de los activistas Esperanza Martínez, Elizabeth Bravo, Benito Bonilla y David Mármol, entre otros, quienes habían denunciado la pérdida de las copias por parte del organismo electoral.

Hasta el mediodía de ayer, los ecologistas –que están inconformes con este proceso– no llegaron al antiguo comisariato de las Fuerzas Armadas, donde se realiza la verificación.

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En un comunicado hecho público el viernes pasado, YASunidos anunció que se declaraban “en resistencia por la defensa del Yasuní” mientras el CNE no detenga el proceso de verificación y se expliquen las supuestas irregularidades en el proceso previo a la verificación de firmas.